Filetes de pollo con níscalos, cebolleta y ajo

Receta de Karlos Arguiñano de filetes de pechuga de pollo empanados acompañados de un guiso de níscalos, cebolleta y ajos frescos.
Raciones
4
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Cocinado
15 m
Tiempo total
15 m
Ingredientes (4 personas):
- 600 g de pechuga de pollo
- 600 g de níscalos
- 2 cebolletas
- 12 ajos frescos
- 2 dientes de ajo
- 150 ml de vino blanco
- 2 huevos
- harina
- pan rallado
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- pimienta
- perejil
Elaboración de la receta de Filetes de pollo con níscalos, cebolleta y ajo:
Pica las cebolletas en dados pequeños y ponlos a rehogar en una cazuela con un chorrito de aceite. Retira la capa exterior de los ajos frescos, pícalos en cilindros y agrégalos. Sazona.
Limpia los níscalos, córtalos en cuartos y añádelos. Sazona y cocínalos durante 5 minutos para que suelten su agua. Vierte el vino y cocínalos durante 10 minutos más.
Corta las pechugas en filetes finos. Salpimienta y empánalos pasándolos por harina, huevo batido y pan rallado. Hazles unas marcas con el filo del cuchillo.
Calienta aceite en una sartén, agrega los filetes y fríelos brevemente por los 2 lados con los ajos con piel. Escúrrelos sobre un plato forrado con papel absorbente de cocina.
Sirve los filetes de pollo empanados y acompáñalos con los níscalos guisados. Espolvorea con perejil picado.
Consejo sobre las setas:
Cuando vayáis a por setas hay que llevar cesta y navaja. Al dejar las setas en la cesta irán soltando las esporas por el camino, de esta manera volverán a reproducirse el año que viene. En cuanto a la navaja es importante para cortar la seta y no destrozarla.
¿Qué son los níscalos?
El níscalo (Lactarius deliciosus), que también se conoce con el nombre de mízcalo o rovellón, es un hongo comestible muy común en España, donde se puede encontrar durante el otoño en pinares y bosques. El níscalo es muy apreciado en gastronomía y se suele servir guisado, asado o formando parte de guisos de carne.
Te animamos a probar un rico guiso de níscalos con patatas o unos huevos rotos con níscalos, dos platos con los que disfrutarás.