Los ambientadores

En el mercado podremos encontrar diferentes sistemas para conseguir que las estancias del hogar huelan a lo que deseemos. Desde ambientadores en spray a las velas aromáticas, pasando por últimos modelos de ambientadores eléctricos que, mediante una pequeña resistencia que se calienta, consiguen desprender el aroma de un líquido perfumado.

Otra opción más económica es crear tus propios ambientadores. Puedes hacer velas aromáticas, utilizar granos de café o cítricos. Lo difícil no es hacerlo sino escoger uno. Una vez escogido tipo de ambientador, deberemos tener en cuenta una serie de consideraciones a la hora de aromatizar nuestro hogar. Son simples detalles que mejorarán el resultado de manera espectacular, por ejemplo:

• En la cocina o en el comedor evitaremos a toda costa utilizar aromas de productos que se utilicen para cocinar. Así, deberemos evitar aromas frutales o de especias, podrían arruinarnos un buen menú.
• El salón es el lugar más indicado para fragancias que posean matices florales o frutales, cítricos por ejemplo.
• Para un dormitorio relajado nada mejor que la lavanda o la melisa.
• Y sin lugar a dudas, fragancias frescas como el limón o la menta para el cuarto de baño.

En cuanto a la posible toxicidad de los ambientadores, es un tema ampliamente discutido y la conclusión generalizada después de haberse realizado múltiples pruebas es que, las emisiones de los productos que hayan pasado los controles que impone la legislación vigente, no son perjudiciales para la salud.