Si se os presenta este problema en vuestro jardín, una solución muy eficaz que acabará con el problema de raíz es escoger un buen herbicida. En el mercado hay una amplia gama de herbicidas, escogeremos el más adecuado a nuestras necesidades, lo prepararemos siguiendo las instrucciones que indique el fabricante y lo aplicaremos de la manera más segura.
Paso a paso
Paso 1
En primer lugar deberemos averiguar la dosis de herbicida que tenemos que aplicar. Esta información suele aparecer en la parte posterior del recipiente. En nuestro caso la dosis recomendada es de un tapón por litro de agua y como la bomba que vamos a utilizar es de dos litros la cuenta es clara: dos tapones del producto.
Paso 2
Una vez que hayamos llenado la bomba con los dos litros de agua, agitaremos el recipiente para conseguir que agua y herbicida se mezclen adecuadamente.
Paso 3
Ha llegado el momento de pulverizar la solución. En primer lugar, para realizar esta tarea os recomendamos que utilicéis unos guantes. No debemos olvidar que estamos trabajando con un producto tóxico.
Paso 4
Seguiremos nuestra tarea metiendo presión a la bomba y ajustando el chorro a nuestras necesidades. Y ya podremos extender el producto, en nuestro caso sin ningún miedo porque se trata de una superficie de piedra. Si fuera césped deberíamos ser más cuidadosos y utilizar un producto más selectivo.
Paso 5
Transcurridos quince días desde la aplicación del producto las plantas adventicias (ex-malas hierbas) habrán desaparecido. Una última recomendación: la bomba con la que apliquéis el herbicida no la uséis para aplicar ni insecticidas ni funguicidas porque podríais matar las plantas.