Si estás en este artículo es porque los topos se han adueñado de alguna parte de tu jardín. ¡No te preocupes! A continuación, te damos una serie de consejos que te ayudarán a alejarlos.
Topos en el jardín: ¿por qué aparecen?
Antes de contaros los distintos métodos que existen para evitar los topos en el jardín, es interesante conocer por qué han aparecido en él.
Estos pequeños animales llegan a nuestros jardines con el principal objetivo de encontrar insectos y otras plagas que viven en el suelo. El problema no reside tanto en su presencia sino en lo que esta conlleva.
Consecuencias negativas de los topos
Mientras los topos van en busca de alimento, van creando túneles y distintas toperas por toda la superficie del jardín.
Normalmente, cavan túneles de entre los 40 y 50 metros y, como consecuencia, forman unos montículos de tierra muy antiestéticos y molestos.

Al crear estas galerías subterráneas por las que se van desplazando, también pueden dañar las raíces de las plantas y otras herramientas de jardinería como los cortacéspedes.
Por si os interesa, Iñigo Segurola nos mostró cómo evitar el ataque de ratones y topos al plantar bulbos de primavera en otoño.
La primavera y el otoño son las épocas del año en las que los topos se encuentran más activos.
Es justo a finales de la estación primaveral cuando estos animales dan a luz por lo que, evitar su presencia en el jardín durante esa época es vital para controlar la población de topos.
Puede que lo desconozcáis pero, en algunos países como Alemania, se trata de una especie protegida. La mejor forma de eliminarlos del jardín es, sin duda alguna, ahuyentarlos. La pregunta entonces es: ¿Cómo conseguimos alejarlos? Te damos algunas opciones.
1. Planta Euphorbia lathyris
Los ojos de estos mamíferos están atrofiados y se guían mediante su agudo oído y, sobre todo, por su olfato.
Es por eso que la primera forma que te proponemos de alejarlos del jardín es plantando una Euphorbia lathyris. Las raíces de esta planta poseen un olor que les desagrada y les repele.
Eliminar topos con plantas
Se le conoce popularmente por los nombres de planta antitopos o planta espanta topos.
2. Ahuyenta topos comercial
Encontrarás estos aparatos de forma fácil en el mercado.
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La forma de utilizarlo es muy sencilla. Lo introduces dentro del agujero de la topera e irá emitiendo una serie de ondas de vibraciones que irritan no solo a los topos sino a los topillos y eso hará que tiendan a irse del jardín.
Con un solo aparato conseguimos que en un radio de 40 metros no exista ningún topo. Este sistema funciona mediante pilas.
3. Ahuyenta topos casero
Otra forma de tener un ahuyenta topos sin tener que gastaros nada de dinero es reutilizando unas botellas de vidrio y unas varas de hierro. Te mostramos el paso a paso para hacerlo.

Cómo hacer un ahuyenta topos casero:
El funcionamiento de este ahuyenta topos casero es muy sencillo: colocaremos las varas de hierro en las toperas (al igual que se hace con los aparatos que existen en el mercado) y, sobre estas, las botellas de vidrio boca abajo.

Cuando el aire entra en las botellas de vidrio, el efecto del eco que se genera, crea y emite unas vibraciones que se trasportan a través de las varas de hierro que están huecas. Así, esta vibración también se transmite a la galería de los topos logrando ahuyentarlos.
De esta manera, hemos creado un ahuyenta topos casero que, además, con el efecto de las varas oxidadas y el vidrio, le dará un toque decorativo al jardín.
Una vez eliminados los posibles topos del jardín, puedes proceder a regenerar el césped y eliminar las toperas o a la original propuesta que te mostramos a continuación.
Uso alternativo de las toperas del jardín
Para lograr un jardín más vistoso, puedes decorar la zona base en la que has colocado los ahuyenta topos. Al plantar distintas plantas en cada base, crearás una composición estética muy llamativa.
Una buena opción para la siembra puede, ser las hierbas silvestres que le aportarán un aspecto florido a cada zona.

Puede que te resulte algo original este tipo de siembra, pero está basada en la teoría del paisajista francés Gilles Clément llamada "El jardín en movimiento".
Esta teoría se centra en crear una nueva jardinería basada en energías positivas a favor de la naturaleza. Es decir, el objetivo es crear una jardinería más ecológica.

En este caso, por ejemplo, consistiría en aprovecharse del "problema de las toperas" para crear un potencial artístico en el jardín.
Estas plantas que sembramos en cada una de ellas aportarán un aspecto silvestre y florido a todo el jardín. Así, quedará un jardín florido en contraste con la hierba cortada del césped.