Moquillo en gatos, qué es, síntomas, contagio y tratamiento

moquillo en gatos
moquillo en gatos

Todo lo que debes saber sobre la enfermedad del moquillo en los gatos. El moquillo en gatos, enteritis infecciosa felina o panleucopenia felina es una enfermedad vírica relativamente común -aunque el número de gatos afectados lleva tiempo disminuyendo, por suerte- que se caracteriza por ser muy contagiosa y tener un elevado índice de mortalidad. Afecta especialmente a gatitos y gatos jóvenes no vacunados.

En este artículo vamos a contarte todo lo que necesitas saber sobre el moquillo en los felinos, que es, ya te lo adelantamos, diferente del que afecta a los perros. Es importante conocer los síntomas y las formas de contagio de esta enfermedad, así como las opciones de tratamiento, para asegurarte de que podrías ayudar a tu amigo peludo llegado el caso. Sigue leyendo y ¡toma nota!

¿Qué es el moquillo en gatos?

La panleucopenia felina, llamada moquillo de forma coloquial, es una enfermedad grave causada por un virus del género de los parvovirus que, como ya hemos mencionado, no es el mismo que afecta a los perros.

Se trata de un agente infeccioso muy resistente (puede sobrevivir hasta un año a temperatura ambiente, en especial en interiores) y altamente contagioso que, una vez dentro del cuerpo, puede infectar a las células del sistema digestivo, los tejidos linfoides y la médula ósea. Si el contagio lo sufre una gata embarazada, el virus también puede afectar al feto.

El nombre de esta enfermedad, panleucopenia, significa disminución de la cantidad de glóbulos blancos y esa es precisamente una de sus consecuencias más significativas. También los glóbulos rojos experimentan una importante caída, lo que en muchos casos acaba provocando anemia.

*El virus de la panleucopenia felina pertenece al género de los parvovirus. Es peligroso, resistente (puede sobrevivir hasta un año en interiores) y muy contagioso.

El moquillo en gatos es, como ya decíamos, una enfermedad seria, con un índice mortalidad muy alto. Aunque cualquier felino puede llegar a contagiarse, afecta principalmente a gatitos y gatos jóvenes que no han recibido la vacuna.

Si bien es una enfermedad típica de los gatos domésticos, el moquillo también puede afectar a animales de las familias de los mustélidos (incluyendo los hurones domésticos), vivérridos y prociónidos.

La inyección que protege a los felinos frente a la panleucopenia es la conocida como trivalente, tal y como te contamos en nuestro artículo sobre las vacunas para gatos.

moquillo en gatos 2
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¿Cómo se contagia el moquillo en los gatos?

El moquillo de los gatos se transmite mediante el contacto directo con un animal infectado, su sangre o cualquiera de sus secreciones (heces, orina, vómitos, saliva, etc.).

Por eso, la convivencia entre un gato infectado y un ejemplar sano no vacunado es muy peligrosa, ya que existen numerosas vías de contagio: uso del mismo arenero o la misma cama, acicalamiento, parásitos que afecten a ambos animales, etc. Es importante recordar, una vez más, que este virus puede sobrevivir hasta un año en el entorno.

*El moquillo se transmite fácilmente a través del contacto con un gato infectado o cualquiera de sus secreciones. Cuando un gato se infecta, debe ser aislado de inmediato.

Incluso los gatos que hayan superado la enfermedad son peligrosos durante meses, ya que tienen restos del virus en su organismo y los liberan a través de la orina y las heces. Lo mismo se aplica a los gatos que se infectasen en el útero de su madre.

Es importante señalar que los gatitos que contraen la enfermedad en el útero materno y sobreviven pueden nacer con daños en el sistema nervioso que deterioren su equilibrio, así como con hidrocefalia, lesiones en el nervio óptico y otros problemas.

¿El moquillo en gatos es contagioso para los humanos?

Si convives con un felino afectado por el moquillo, al menos sobre esta cuestión no debes preocuparte: esta enfermedad no es una zoonosis, lo que significa que no existe ningún riesgo de transmisión de gatos a humanos.

Tampoco hay riesgo de transmisión de gatos a perros. Estos últimos pueden tener moquillo, pero, pese a que el nombre sea el mismo, se trata de una enfermedad diferente, causada por otro tipo de virus. Te lo contamos en nuestro artículo específico sobre el moquillo en perros.

*No hay riesgo de contagio a los humanos, ni entre perros y gatos. Pero cuidado: si no tienes cuidado, tú si podrías actuar como transmisor y contagiarle el virus a tu gato.

En lo referente al entorno doméstico, el moquillo, en definitiva, solo puede transmitirse entre gatos y hurones.

De todos modos, es importante que tengas en cuenta que tú sí que podrías llegar a transmitirle el moquillo a tu gato de forma involuntaria si has estado en contacto con un ejemplar infectado (si has estado con gatos callejeros, por ejemplo) y luego manipulas a tu peludo sin haber tomado precauciones.

Síntomas habituales del moquillo en gatos

Los síntomas del moquillo en los gatos suelen ser los siguientes:

  • Vómitos acompañados de restos de comida, que a medida que avance la enfermedad se harán más espumosos y adquirirán un tono amarillento.
  • Diarrea compuesta por heces líquidas acompañadas de sangre digerida. Este síntoma en particular se presenta cuando la enfermedad ya está avanzada.
  • Pérdida de apetito.
  • Pérdida de peso, como consecuencia de todo lo anterior.
  • Deshidratación.
  • Anemia.
  • Episodios de fiebre.

En general, un gato afectado por el moquillo estará totalmente apático, postrado y desganado. Además, se negará a beber y probar alimento alguno, o lo hará muy raramente.

El moquillo es una enfermedad peligrosa, como ya hemos señalado, por lo que si en algún momento tu gato presenta síntomas compatibles, deberás llevarlo al veterinario lo antes posible.

Tratamiento del moquillo en gatos

Por desgracia, no existe ningún tratamiento para el moquillo en gatos. Todo lo que se puede hacer es mantener controlados los síntomas para facilitar que el organismo del animal luche contra el virus.

En la mayor parte de los casos, para ayudar a un gato con moquillo es necesaria su hospitalización para administrarle líquidos por vía intravenosa, ya que la deshidratación supone un grave riesgo. También se le examinará y, de ser necesario, se le tratará cualquier posible infección oportunista que pueda contraer.

En los gatos muy jóvenes no vacunados la tasa de mortalidad de esta enfermedad puede llegar a ser del 90%. Sin embargo, si un gato recibe tratamiento y supera los primeros días, puede considerarse que sus probabilidades de supervivencia son buenas. Todos estos son, en cualquier caso, datos meramente orientativos; si tienes cualquier duda sobre el estado de tu gato y su pronóstico, consúltalo con tu veterinario.

*El moquillo en gatos no tiene tratamiento, por lo que lo único que se puede hacer es actuar sobre los síntomas y esperar. También hay algunos cuidados básicos que puedes proporcionarle a tu mascota en casa.

moquillo en gatos 11
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¿Hay remedios caseros para el moquillo en gatos?

Tampoco existen remedios caseros eficaces contra el moquillo en gatos. Si sospechas que tu felino tiene moquillo, la única opción será llevarlo al veterinario y seguir sus indicaciones en todo momento.

No obstante, si tu gato supera el moquillo y recibe el alta, sí que podrás ayudarlo cuando esté de nuevo en casa siguiendo estos consejos:

Ofrécele alimentos de alta calidad y que estimulen su apetito. Si tu gato rechaza el pienso, prueba a darle comida húmeda o alimentos naturales como carne o pescado hervidos.

Induce al gato a beber agua para prevenir la deshidratación. Puedes utilizar una jeringuilla para introducir el agua (muy poco a poco) en su boca o una fuente para gatos automática, por ejemplo.

Acarícialo, reconfórtalo, juega con él con suavidad... en definitiva, pasa tiempo a su lado para mejorar su estado de ánimo y combatir su estado de apatía.

Moquillo en gatos

¿Se puede prevenir la panleucopenia felina?

La mejor forma de prevenir la panleucopenia felina es mediante la vacunación. Específicamente, la clave es la vacuna trivalente felina, que se administra a las 8 semanas de edad, con dosis posteriores de recuerdo.

También es importante que seas precavido si te relacionadas con gatos desconocidos (felinos callejeros, fundamentalmente), además de con el tuyo, y que tomes medidas contra los parásitos externos que puedan actuar como vectores de la enfermedad.

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