Este es el gadget que tienes y no sabías que puede hacer que la comida del avión sepa mejor
He acumulado muchas millas cruzando el Atlántico. Y después del estrés del check-in, la seguridad y el embarque, no hay nada mejor que relajarse, encender una película y disfrutar de una comida dentro del avión. Pero, si alguna vez has pedido pasta o carne y al primer bocado has pensado: Esto no sabe igual o no tiene sabor, no estás solo o sola. Hay una razón para esto y hay una forma sencilla con la que podemos cambiar esta percepción.
Cuando subimos a un avión, nuestro sentido del olfato se ve alterado por varios factores. La cabina presurizada es mucho más seca que el aire a nivel del mar, lo que reseca nuestras fosas nasales y reduce nuestra sensibilidad al olfato y al gusto. Esto hace que los alimentos nos parezcan mucho menos intensos.
En 2014, el profesor Charles Spence, jefe del Laboratorio de Investigación Crossmodal de la Universidad de Oxford, junto con un equipo de investigadores, publicó un estudio sobre cómo el ruido de los aviones puede afectar el sabor de los alimentos y bebidas en el aire.
Según Spence, el aire seco de la cabina, el cambio en la presión del aire y el zumbido constante del motor afectan nuestra capacidad para percibir sabores dulces y salados. Por eso, las comidas en los aviones necesitan más sal y azúcar para tener el mismo sabor que en tierra.
Spence sugiere una sencilla solución: usar auriculares con cancelación de ruido. Estos dispositivos cancelan el sonido de los motores, permitiéndote disfrutar mejor de los sabores. Además, recomienda escuchar música que realmente te guste, ya que cuanto más disfrutas de la música, más te gusta la comida. Y esto no es solo una opinión; la ciencia respalda que escuchar tu música favorita puede mejorar el sabor de la comida y las bebidas.
Para afinar aún más tu experiencia mientras vuelas, Spence sugiere escuchar sonidos agudos para resaltar la dulzura y tonos bajos para resaltar las notas amargas. ¿Te animas a probarlo en tu próximo viaje?
