Los tratamientos antienvejecimiento son una fórmula cada vez más demandada. Con la edad perdemos elasticidad y luminosidad en la piel, nuestro rostro se ve más apagado y pierde ese aspecto jugoso tan deseado.
Lo último en estética son las infiltraciones de vitaminas para dar luz a nuestra piel y corregir pequeñas imperfecciones como poros abiertos o cuperosis. Además, estas inyecciones obligan a los fibroblastos a trabajar para que que no bajen su producción. Es un tratamiento recomendado a partir de los 25 años.
Se trata de inyectar en la epidermis y capa superficial de la piel un cóctel multivitamínico enriquecido con otros compuestos estimulantes y nutritivos. Se suelen utilizar vitaminas A, B, E, C (estimulan la función de las células) con ácido hialurónico y aminoácidos
(estimulan la producción de proteínas y elastina), minerales, coenzimas y soluciones antioxidantes que reducen los radicales libres (ácido ascórbico y glutation) y regenerantes (silicio orgánico).
El número de sesiones que necesita cada persona dependerá de su tipo de piel y el precio de cada sesión oscila entre los 100 y los 300 euros.
La clave para un resultado perfecto está
en aplicar la dosis adecuada según necesidades, un secreto que guardan los médicos, por
eso es importante acudir a un buen profesional.

Tratamiento de infiltraciones de vitaminas
El tratamiento dura unos 30 minutos y se suele realizan en rostro, cuello y escote:
- Se desmaquilla la piel y, sobre la dermis limpia, se aplica una crema anestésica y se deja actuar 15 minutos. De esta forma, las infiltraciones no producen dolor sino sólo una ligera molestia.
- Desinfectar. Con una pequeña aguja insertamos el cóctel de vitaminas en pequeños depósitos de la epidermis.
- Se aplican unas compresas frías y se vuelve a desinfectar.
Los efectos del tratamiento son inmediatos, pero para que sea acumulativo y no desaparezca, se suelen realizar 4 sesiones seguidas cada 15-20 días. Para conservar el resultado con posterioridad, es recomendable repetir la sesión una vez transcurridos 6-8 meses o después del verano (sol, mar, piscinas) e incluso en invierno (frío, viento). Los ingredientes inyectados son fácilmente absorbibles por la piel y no tienen efecto rebote, es decir, si no te haces más sesiones tu piel recuperará su aspecto anterior o incluso se mantiene con mejor aspecto.
Beneficios de las infiltraciones de vitaminas
- Reactivación de los fibroblastos de la dermis.
- Aumento de la estructura y tersura de la dermis.
- Efecto antioxidante, favorece a la prevención de futuros signos de envejecimiento.
- Aplicable en rostro, cuello, escote e incluso en las manos.
- Cambios notables a partir de la primera sesión.
- Tras la sesión puede retomar su actividad normal.
Precauciones
Se desaconseja en caso de embarazo o alergia a algún de los componentes inyectados. Antes del tratamiento no tomes ácido acetil-Salicílico o ibuprofeno, toma paracetamol. Después de realizar el tratamiento se puede llevar vida normal y usar maquillaje, pero no se debe fumar inmediatamente después ni exponerse al sol en los días siguientes.