Por ello, desde Bricomanía os vamos a enseñar paso a paso cómo realizar correctamente la limpieza de los rodillos una vez han sido utilizados.
De esta forma, lograremos alargar la vida útil de los rodillos y evitaremos tener que comporar nuevos cada vez que queramos pintar la casa.
Paso a paso para limpiar los rodillos después de pintar
Paso 1
Lo primero que debemos hacer es quitar los restos de pintura que quedan sobre la superficie del rodillo. La forma más fácil de hacerlo es frotando el rodillo con hojas de periódico hasta eliminar la mayor parte del sobrante.
Paso 2
A continuación, enjabonamos el rodillo, lo aclaramos bien con abundante agua y lo apretamos con los dedos para asegurarnos de que está totalmente limpio.
Paso 3
Otra alternativa para eliminar eficazmente los restos de pintura al agua en rodillos, es el uso de este sencillo accesorio que nos permitirá realizar la tarea de una manera limpia, rápida y eficaz.
Paso 4
Pasamos el rodillo por la hendidura exterior del accesorio para quitar la mayor parte de pintura posible y lo insertamos en el envase de plástico.
Paso 5
Después, lo conectamos a una toma de agua mediante un conector rápido de manguera y abrimos el grifo.
Debemos sujetar el rodillo con la mano durante el proceso de lavado.
Paso 6
Transcurrido el tiempo de lavado que nos indica el fabricante, sacamos el rodillo del envase y comprobamos que está completamente limpio.
Paso 7
Remataremos el trabajo sacudiendo con fuerza la herramienta para retirar la mayor cantidad de agua posible.