Solera para caseta metálica

Un trabajo rápido y fácil de realizar, con el que obtendremos un lugar adicional de almacenaje. Entre la gran variedad de usos que podemos dar a la caseta, nosotros vamos a utilizarla para guardar en su interior todos los útiles y herramientas de jardinería que tenemos. De este modo, además de ordenados y a mano, los utensilios permanecerán perfectamente protegidos de las inclemencias del tiempo.

Comenzaremos el trabajo retirando un manto de hierba de unos 5 cm de grosor y después, taparemos la superficie con una manta geotextil. Echamos una capa de arena y colocamos unas placas de hormigón ligero, con las que conseguiremos una base sólida y estable. A continuación, montamos la estructura de apoyo de la caseta y la fijamos al suelo con taco químico. Finalmente, colocamos los postes angulares, atornillamos los paneles y fijamos el resto de las piezas que forman la caseta, siguiendo las indicaciones del fabricante.

Paso a paso para construir una solera de hormigón para caseta metálica:

Paso 1
Lo primero que tendremos que hacer es delimitar el terreno con unas estacas y un cordel, y hacer el vaciado retirando la tierra con una azada. Para trabajar con mayor seguridad, nos protegeremos las manos con unos guantes fuertes.

Paso 2
A continuación, cubrimos la superficie con una malla geotextil, para impermeabilizar la zona y evitar que la hierba crezca.

Paso 3
El siguiente paso consiste en hacer una capa de arena sobre la manta: echamos la arena, la extendemos con un listón de madera o una regla y comprobamos que está a nivel.

Paso 4
Con la superficie totalmente lisa, colocamos las planchas de hormigón ligero y montamos la base de la caseta, uniendo los perfiles entre sí con unos tornillos rosca chapa. Emplearemos el taladro atornillador provisto de una punta adecuada.

Paso 5
Sustituimos la punta por una broca especial para hormigón y, después de marcar los puntos de anclaje, hacemos los agujeros en las placas. Perforaremos estos orificios accionando el percutor del taladro.

Paso 6
Una vez que hayamos hecho todos los agujeros, aplicaremos el taco químico con la ayuda de una pistola convencional de silicona. Este producto químico, compuesto de dos sustancias diferentes, nos permite realizar fijaciones de alta resistencia, ya sea de material de construcción macizo o hueco.

Paso 7
Presentamos la estructura metálica en su posición, insertamos las varillas en los agujeros y dejamos que el producto se endurezca. Es importante dejar un pequeño margen en la parte superior de la varilla, para después poder amarrar la base con unas tuercas y unas arandelas.

Paso 8
Ya podemos comenzar a montar la caseta. En primer lugar, ponemos los soportes verticales en los ángulos de la base y atornillamos los paneles al armazón, tal y como viene dibujado en el libro de instrucciones. Colocamos también unos canales en la parte interior de lo que va a ser la caseta, con el fin de reforzar la estructura.

Paso 9
Después, continuamos poniendo más paneles, hasta levantar las cuatro paredes de la caseta. Todos los tornillos, arandelas y demás herrajes que necesitamos para el montaje de la caseta vienen incluidos en el kit.

Paso 10
En este paso, presentamos las jambas de la puerta y las sujetamos con unos tornillos rosca chapa.

Paso 11
Ponemos los faldones, fijamos las vigas con unas escuadras metálicas y colocamos las piezas que conforman el tejado. Es conveniente que las escuadras sean galvanizadas, así no se oxidarán con la humedad.

Paso 12
Para finalizar el trabajo, sólo nos queda instalar las puertas que, en este caso, son correderas. Introducimos las ruedas en los perfiles, encajamos las puertas y comprobamos que éstas se abren y cierran correctamente.

Paso 13
Ya tenemos la caseta metálica montada. A partir de ahora, no tendremos ninguna excusa para tener nuestros útiles de jardín guardados y bien organizados. Asimismo, al estar protegidas del viento y la lluvia, las herramientas permanecerán en perfecto estado durante mucho más tiempo.