Cómo pintar una pared exterior rugosa en 6 pasos

Con el paso del tiempo, la pintura de la fachada de tu casa es probable que necesite una renovación para mejorar su aspecto.
Un paso clave antes de pintar una pared exterior es elegir una pintura resistente a los rayos UV y a las condiciones climáticas adversas. La pintura, además de renovar el aspecto de la pared, también la protegerá.
A continuación, te explico todo lo que debes saber para pintar una pared exterior rugosa con éxito. ¡Presta atención!
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Tiempo total
2 h
Herramientas
- Rodillo para pintar fachada exterior.
- Brocha de cerdas sintéticas.
- Cepillo de púas rígidas.
- Rasqueta triangular.
Materiales
- Plástico protector.
- Cinta de carrocero.
- Masilla reparadora.
- Espátula.
- Pintura acrílica para exterior.
- Cubeta.
Paso a paso para pintar una pared exterior rugosa

Paso 1
Antes de comenzar a pintar, debes eliminar restos de pintura suelta y limpiar la fachada. Para ello, pasa un cepillo de púas rígidas por la superficie.
Paso 2
A continuación, cubre las ventanas y áreas que no quieras pintar con un plástico protector.
Paso 3
Es el momento de sanear la fachada y reparar las grietas o desperfectos que pueda tener. Si no localizas ninguna, este paso no será necesario.
Abre las grietas en V con una rasqueta triangular y rellena las grietas o los desperfectos con una masilla adecuada y una espátula.
Deja secar la masilla el tiempo recomendado por el fabricante.
Paso 4
Comienza a pintar la pared exterior rugosa por los bordes y recovecos. Utiliza una brocha de cerdas sintéticas. Este tipo de brochas, debido a su mayor rigidez, impregnan con mayor facilidad superficies rugosas y con relieve.

Paso 5
A continuación, aplica una capa de pintura en la fachada con un rodillo de pelo largo vertical y luego reparte la pintura horizontalmente, con movimientos lentos, cubriendo bien las irregularidades. Asegúrate de aplicar una capa generosa.
Paso 6
Deja secar el tiempo recomendado por el fabricante y aplica una segunda capa de pintura. Como ves pintar una pared de exterior rugosa es muy sencillo. ¿Te animas?
¿Qué pintura elegir para pintar una pared rugosa de exterior?
Uno de los pasos fundamentales para un buen resultado al pintar paredes rugosas es elegir la pintura adecuada. Tiene que ser una pintura resistente indicada para exteriores. Vemos las mejores opciones:
Pintura acrílica para exteriores
La pintura acrílica es una de las más utilizadas para fachadas exteriores debido a sus numerosas ventajas. Es microporosa, lo que permite que la pared respire y evita la acumulación de humedad, reduciendo así la aparición de moho. Además, es resistente a los rayos UV y se seca rápidamente.
Este tipo de pintura es impermeable y soporta bien los cambios de temperatura, lo que la convierte en una opción ideal para fachadas exteriores. Otra ventaja es que no desprende olor, es lavable y no se amarillea con el tiempo, esto garantiza que la fachada se mantenga en buen estado durante años.
Pintura elastomérica
La pintura elastomérica es especialmente recomendable para fachadas muy rugosas o con tendencia a agrietarse. Es una pintura altamente elástica que se expande y contrae sin agrietarse, adaptándose a los movimientos de los materiales causados por los cambios de temperatura.
Además, es impermeable y resistente a los rayos UV, lo que protege las paredes de la humedad y los daños causados por el sol. Una opción ideal para climas con cambios bruscos de temperatura.
Consejos al pintar una pared rugosa de una fachada
- Proteger los marcos de las ventanas, el suelo y los elementos que no quieres pintar.
- Si la fachada es muy alta, puedes trabajar más cómodamente con un andamio o utilizando un rodillo con mango extensible.
- Si la pintura se cuartea tras seguir estos pasos, aplica una capa de imprimación.
- Asegúrate de no pintar la fachada en días extremadamente calurosos o húmedos. La pintura puede secar demasiado rápido o no adherirse bien si las condiciones no son las adecuadas. Además, se puede abombar o agrietar.
- No pintes la fachada en días con pronóstico de lluvia. La humedad y el agua arruinarán la pintura que no está completamente seca.
- Es importante respetar los tiempos de secado entre cada capa y capa. Normalmente, rondan las 6 - 8 horas, pero tendrás que leer las indicaciones del fabricante.
- Después de pintar la fachada, es recomendable limpiarla y revisarla anualmente para asegurarte de que se mantenga en buen estado.