Cómo pintar una pared con una jeringuilla

Si buscas un detalle para la pared pero has descartado los típicos cuadros y no sabes qué poner, te proponemos una idea original y diferente.

Sólo necesitas pintura de diferentes colores y una jeringuilla. Las gotas cayendo desde el techo crearán una cortinilla de colores curiosa y muy decorativa.

Podemos hacer que los colores de las líneas se integren con el resto de elementos del espacio.

Paso a paso para pintar una pared con una jeringuilla

Paso 1
Elige un par de colores de pintura plástica que contrasten con el de la pared.

Paso 2
A continuación, protege el zócalo y el suelo con plástico y cinta adhesiva.

Paso 3
Comenzamos a pintar. Lo primero es cargar una jeringuilla grande con uno de los colores.

Paso 4
Después, limpiamos la punta y la apoyamos en la parte superior de la pared. Vamos presionando hasta que una gota de pintura caiga poco a poco generando una línea de color. Y así vamos lanzando gotas por la pared de ese rincón que necesitamos decorar.

Paso 5
Cuando acabemos con un color rellenamos el espacio con líneas del otro tono que habíamos elegido. Y hacemos la misma operación. Vamos aplicando gotas de forma aleatoria creando la composición que más nos guste.

Paso 6
De esta manera tan original y divertida hemos llenado de encanto y personalidad un rincón de nuestro salón.