Paso a paso
Paso 1
Comenzaremos arreglando la taza. Para trabajar cómodamente, podemos hacer una base de arena sobre un recipiente e introducir el objeto, asentándolo adecuadamente.
Paso 2
Si no tenéis arena podéis emplear por ejemplo, arroz o harina.
Paso 3
Otra opción es fijar una pieza de gomaespuma a la taza, a modo de sujeción, con unas tiras de cinta adhesiva.
Paso 4
En primer lugar, repasamos las zonas de unión con un trapo humedecido en alcohol, para mejorar el agarre del producto.
Paso 5
A continuación, mezclamos bien los dos componentes de la soldadura hasta conseguir un color homogéneo.
Paso 6
Con el mango de la espátula, aplicamos una capa fina de la mezcla sobre una de las superficies a pegar...
Paso 7
... y unimos las piezas, presionando ligeramente para que se adhieran bien.
Paso 8
Mientras la soldadura se endurece, vamos a reparar el trofeo. Colocamos un recorte de madera con una pieza de gomaespuma como soporte y siguiendo el mismo procedimiento, pegamos el trofeo a la base.
Paso 9
De esta manera tan sencilla y en muy poco tiempo, tanto la taza como el trofeo volverán a estar como el primer día.