Un sofá hundido es incómodo y da un aspecto dejado a nuestra decoración. ¡Te damos algunos trucos para arreglar y mejorar un sofá con este problema y cómo prevenir que se hunda!
ÍNDICE DE CONTENIDOS
Hogarmania, 13 de enero de 2021
Muebles
Un sofá hundido es incómodo y da un aspecto dejado a nuestra decoración. ¡Te damos algunos trucos para arreglar y mejorar un sofá con este problema y cómo prevenir que se hunda!
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Hogarmania, 13 de enero de 2021
¿Tu sofá está hundido y además de incómodo estropea tu decoración? Te enseñamos algunos trucos para solucionar este problema y que además de mejorar su apariencia vuelva a ser tan cómodo como cuando era nuevo.
También te damos algunos consejos para que no se hunda y mantenerlo terso y cómodo durante más tiempo. ¡Toma nota!
El armazón del sofá puede estar hecho de diferentes materiales: Madera, cintas elásticas, muelles… Lo primero debes saber de qué está hecha la estructura de tu sofá, para poder repararlo con nuevos materiales.
No obstante, antes de comenzar a arreglarlo, debes valorar si merece la pena, ya que en algunos casos, sobre todo cuando la propia estructura está deteriorada, suele ser un trabajo un poco costoso.
Si tu sofá tiene la espuma de los asientos hundida no te preocupes, porque es un problema muy sencillo de solucionar. Solo tienes que comprar espuma nueva (que puedes conseguir en cualquier tienda de tapicería o bricolaje) y volver a introducirla en los cojines.
Las densidades de espuma más recomendadas son entre 25 y 30 kg/m³, pero debes informarte previamente de cuánto es la que tiene tu sofá.
No coloques una espuma demasiado fina ya que los cojines quedarán excesivamente holgados y, sobre todo, no introduzcas una espuma demasiado gruesa porque la tela del sofá cederá y terminará naciéndose.
Si tu sofá es de cintas elásticas, comprueba si están flojas, sueltas o rotas. Si es necesario puedes reemplazarlas y darás firmeza y estabilidad al sofá. Como en el caso anterior, debes conocer previamente el gramaje y largura de las cintas de tu sofá.
Este tipo de cintas también se venden en tiendas de tapicería, ferretería o bricolaje. Este trabajo es bastante más costoso, porque deberás llegar a la estructura del sofá. Para ello, debes soltar la tela que separa las cintas de la parte posterior de los asientos.
Una vez solucionado el trabajo de tapicería es muy sencillo. Colocar de nuevo una tela protectora (puedes reutilizar la que traía el sofá) e insertar unas grapas alrededor, de modo que quede tensa y lisa.
Si tu sofá es de muelles, deberás comprobar si es algún muelle concreto el que se haya roto, torcido y desgastado.
Para acceder a ellos, también tendrás que llegar hasta la estructura del sofá (descosiendo la tela que separa los cojines de la estructura).
En tiendas de ferreterías, tapizado… podrás encontrar muelles de recambio, pero debes saber previamente su diámetro y longitud.
Para prevenir que un sofá se hunda es importante mantener una buena postura al sentarnos en él.
Sentados o tumbados, intentar equilibrar nuestro peso de forma uniforme, sin marcar demasiado los codos o las rodillas.
Es mejor que te sientes en el centro y no entre dos asientos, ya que favorece que se hundan en las juntas.
No colocar libros u objetos pesados (el ordenador portátil, por ejemplo) sobre el sofá también ayudará a que mantenga una forma más tersa y estable.