Cómo limpiar una ducha muy sucia: guía de limpieza

Mantener la ducha limpia es esencial, y la principal amenaza es la acumulación de cal. No es necesario recurrir a productos comerciales para combatirla: con solo unos minutos a la semana y este método sencillo y ecológico, podrás mantener la ducha impecable.

Las duchas, al estar en contacto constante con el agua y la humedad, tienden a acumular restos de cal, jabón y moho que pueden afectar tanto su apariencia como su durabilidad. Con unos sencillos pasos y los productos de limpieza más adecuados, puedes limpiar una ducha de manera eficaz y sin dañar el medio ambiente. A continuación, te mostramos una guía práctica para dejar tu ducha impecable, libre de manchas y malos olores.

¿Qué necesitas para limpiar una ducha?

Antes de empezar, reúne los materiales necesarios para limpiar cada parte de la ducha sin dañarla. Estos son los mejores productos de limpieza para limpiar una ducha:

• 1. Vinagre blanco para desinfectar, desengrasar y eliminar manchas de cal, sarro y restos de jabón de la ducha.
• 2. Bicarbonato de sodio para deshacerte de las manchas difíciles del plato de ducha, los azulejos y la bañera.
• 3. Juego de limón . Sus propiedades ácidas ayudan a disolver la suciedad y deja un aroma fresco en el baño.
• 4. Peróxido de hidrógeno : Es un blanqueador natural que puede ayudar a eliminar manchas difíciles.
• 5. Limpiador de baño : Existen muchos productos comerciales específicos para limpiar baños que contienen agentes desinfectantes y desengrasantes.
• 6. Limpiador antical : Son ideales para eliminar la acumulación de cal en las griferías y mamparas de la ducha.
• 7. Agua caliente , esponjas , bayetas de microfibra y guantes de limpieza.

Paso a paso para limpiar una ducha y eliminar la cal

En general, puedes limpiar la ducha a fondo con una solución de vinagre blanco (1/4 taza), agua tibia (3/4 tazas) y bicarbonato de sodio (2 cucharadas). Mezcla los ingredientes en una botella, agítala y pulveriza el limpiador por toda la ducha, su plato, los azulejos, la grifería y la mampara. Deja que actúe de 20 a 30 minutos y luego usa un cepillo para frotar las manchas y enjuaga con agua caliente. Finalmente, seca la ducha con un paño para evitar manchas de agua.

En los siguientes pasos, tienes una guía detallada sobre cómo limpiar cada rincón de la ducha y mantenerla libre de cal y residuos de jabón:

1.Prepara la zona

Retira todos los objetos de la ducha y ventila bien el baño. Recoge botes de higiene personal y si están vacíos, recíclalos. Revisa también la rendija del desagüe. Si ves que no traga el agua o lo hace muy lento, consulta esta guía sobre cómo limpiar el desagüe de la ducha.

3. Rocía el limpiador por la ducha

Puedes utilizar un limpiador comercial especial para baños o una la solución casera de vinagre, bicarbonato y limón. Lo importante es que pulverices el limpiador por toda la superficie de la ducha (azulejos, plato, alcachofa de la ducha, los grifos y otras partes metálicas), especialmente en las esquinas y los recovecos, donde más suciedad y cal se acumula.

Si las juntas de los azulejos están negras, ojo, indica la presencia de moho y hongos. Debes limpiar la zona con lejía o un limpiador de oxígeno activo. Consulta esta guía para aprender a limpiar los azulejos del baño a fondo.

4.Deja actuar y aclara

Si optas por limpiar la ducha con un limpiador comercial, lee las instrucciones del fabricante para sacarle el máximo rendimiento al producto.

Si has optado por limpiar la ducha con vinagre y bicarbonato, deja que la solución casera repose un mínimo de 20 minutos antes de frotar. Al igual que antes, incide en las zonas con mayor acumulación de cal. Después, utiliza una esponja o cepillo para eliminar manchas y arrastrar la suciedad de las esquinas al exterior. Como paso final, enjuaga toda la ducha con agua caliente.

Puedes aprovechar este momento para limpiar la rejilla de ventilación del baño, un artilugio básico para evitar un exceso de humedad en esta estancia.

5.Seca y abrillanta con una bayeta de microfibra

Para evitar marcas de agua y lograr un acabado impecable, seca todas las superficies con una bayeta de microfibra. La microfibra es excelente para evitar pelusas y dar un brillo extra a las superficies metálicas.

Cómo limpiar manchas difíciles de la ducha

Si la ducha lleva tiempo sin limpiarse, es normal que tenga manchas de agua, cal, sarro e incluso moho. A continuación, vemos cómo quitar este tipo de suciedad de la ducha:

• Depósitos de cal : si la ducha tiene mucha cal, rocía vinagre blanco en las áreas afectadas, espera cinco minutos y procede a limpiar con un cepillo y enjuaga con agua caliente.
• Moho en la ducha : si descubres manchas negras en las juntas de los azulejos o los recovecos del mecanismo de la mampara, elimina los hongos con lejía (lavandina) o un limpiador a base de oxígeno activo, Oxi Active Bosque Verde sin lejía de Mercadona .
• Óxido : Si tienes grifos o accesorios de metal en la ducha, pueden oxidarse con el tiempo, especialmente si están expuestos a la humedad y a productos químicos. Además del vinagre, un buen producto para acabar con el oxido es el removedor profesional de óxido EQM - ECO-804.
• Marcas de agua : Se acumulan sobre todo en la mampara de la ducha. Puedes utilizar limpiadores antiempañantes para reducir las manchas de vapor y cal.

Consejos de mantenimiento para una ducha impecable

Todo objeto que se precie debe ser cuidado como tal. No permitas que tu ducha acumule suciedad y malos olores. Un buen truco es secar la ducha después de cada uso. Puedes hacerlo con una bayeta de microfibra o una escobilla de goma. Con retirar el exceso de agua es más que suficiente.

Para evitar el exceso de humedad, ventila el cuarto de baño a diario y tras una ducha caliente. La ventilación es clave para evitar el moho y la acumulación de humedad en la ducha.

Finalmente, no descuides la limpieza. Dedica unos minutos a limpiar la ducha semanalmente para evitar la acumulación de cal y manchas de jabón. Este hábito reduce la necesidad de limpiezas profundas y mantiene la ducha en condiciones óptimas.

¡Y listo! Ahora que ya sabes cómo limpiar la ducha, no dudes en poner en práctica estos consejos para que siempre esté impecable. Recuerda secar las superficies después de cada uso y ventilar el área para evitar problemas de humedad.