Productos para zonas húmedas
- Desengrasante
- Multiuso
- Rociadores
- Trapos de algodón
- Espátula
- Esponja
- Cepillo de dientes
Las salpicaduras de agua, los restos de jabón, partículas de grasa y el humo de la cocina y los excesos de los productos en spray usados en nuestro aseo personal se mezclan con el polvo y son un reto para la limpieza en húmedo. Para este tipo de limpieza necesitarás más productos y utensilios que para hacer la limpieza en seco.
En el cesto tiene que haber desengrasante y productos multiusos para acabar con la grasa y disolver las manchas secas. Un par de rociadores y trapos nuevos de algodón, con esos trapos te aseguras de eliminar las manchas y de que no se extiendan en capas mayores. Lleva el trapo en el hombro para tenerlo siempre a mano, cuando esté sucio ponlo en el cesto de la limpieza y coge uno limpio.
Utilizar utensilios especiales como espátulas y esponjas abrasivas te ayudarán a eliminar las manchas pegajosas en armarios y muebles. Echa abundante desengrasante con un spray antes de rascar. El limpiador ayuda a ablandar las manchas y protege las superficies para que no se rayen.
Usa un cepillo de dientes para las ranuras y las grietas. Úsalo en las esquinas, en las juntas de los azulejos y en los bordes del fregadero y los muebles. Un cepillo de dientes largo evitará que te dejes los nudillos, los de cerdas fuertes son mejores para restregar las manchas secas de comida.