Hoy en día, cualquiera puede automatizar su vivienda, en mayor o menor grado. Y podemos hacerlo por la comodidad que nos aporta, por seguridad, por economía, o porque tenemos conciencia ecológica. Lo cierto es que, si nos decantamos por una vivienda inteligente, obtendremos muchos beneficios.
Seguridad
Una los objetivos de contar con una vivienda inteligente, es el control de la seguridad. Vinculada a sistemas de alarma, de detección de incendios, u otras aplicaciones que aumentan la seguridad en los diferentes edificios que usamos diariamente.
Mayor confort
Los sistemas de una casa domotizada se encargan de regular todos lo elementos en la vivienda, por lo que no tenemos que estar revisando cada habitación, para comprobar las ventanas, o cualquier otra cosa.

Ahorro energético
Con la domótica podemos gestionar de manera inteligente y automática la iluminación, electrodomésticos y entrada de luz a la vivienda. Aprovechando mucho más los recursos naturales.
Mejora el medio ambiente
Una instalación domótica nos permite no sólo mejorar la comodidad y la seguridad de nuestra vivienda, sino reducir considerablemente el uso de energía de nuestros electrodomésticos, como lavadora, sistema de climatización, nevera, entre otros. Un hecho que repercute positivamente en el medio ambiente.
Mejor Accesibilidad
Los sistemas domóticos mejoran y facilitan la vida a aquellas personas de movilidad reducida o que tengan algún tipo de discapacidad. ¿Cómo? Nos dan la posibilidad de hacer un seguimiento y control, y avisa a los servicios médicos o de urgencia, cuando detecta algún comportamiento anómalo.
Control independiente de cada área de la vivienda
Las instalaciones domóticas permiten realizar un control zonificado de las estancias de nuestra casa. Al controlar cada estancia de manera individualizada, podemos minimizar los riesgos por separado y mejorar el consumo en términos de ventilación, climatización y calefacción, entre otros.
Ahorro económico
Una vivienda domotizada al permitir gestionar todos los elementos de control que contribuyen al ahorro de agua, electricidad y combustibles se obtiene una reducción considerable en el gasto y por consiguiente en nuestras facturas.

¿Qué podemos domotizar en nuestra vivienda?
Para tener un asesoramiento lo más concreto posible es importante conocer los sistemas de domótica que podemos integrar para controlar nuestra vivienda:
Control de temperatura
A través de termostatos locales o desde una pantalla táctil. Lo conseguimos con una instalación de un módulo de gestión de energía que nos permite visualizar el consumo eléctrico de nuestro hogar. Esto nos permitirá controlar tanto la ventilación, como la climatización y calefacción en nuestra casa.
Control de iluminación
Podemos manejar las luces por estancias, por plantas o de forma general para toda la vivienda, programando el encendido y apagado de las mismas a una hora determinada. Además, de incluir detectores de presencia que incorporan un sensor de luz ambiente en zonas de paso para que las luces se enciendan automáticamente cuando detectan movimiento.
Automatización de persianas
Programaciones de maniobra de persianas de la casa domotizada, así como la bajada general cuando se acciona el botón de pánico de la alarma de seguridad.
Control sistemas de alarmas y detectores
Instalación de una central de alarma que detecta humos, inundaciones y fugas de gas, conectada a detectores de presencia de la casa domotizada, que permiten efectuar llamadas de hasta cinco números de teléfono.
Cámaras de seguridad
Activación de la grabación de imágenes mediante la instalación domótica para nuestra vivienda unifamiliar, usando cámaras de seguridad y visualización de esas imágenes desde el Smartphone, Tablet o el ordenador.
Sonido, música
Control del sistema de sonido por estancias, permitiendo escuchar distintas fuentes de sonido en cada estancia de la vivienda domótica, o reproducir la música de nuestro Ipod o del Home Cinema.
Escenarios o simulación de presencia
Programación de escenarios personalizables en la casa domotizada, para controlar la iluminación, el sistema de calefacción, el sonido y las persianas al mismo tiempo, de forma que desde el exterior parezca que estamos en casa, en periodos de vacaciones, fines de semana, etc.

El precio de tener una casa domotizada puede variar de 1.000 a 50.000 euros. Esto dependerá del alcance de la propia instalación. ¿A qué nos referimos con esto? Pues a lo que queramos que controle nuestro sistema de domótica. Por ejemplo, si solo queremos nuestra vivienda solo controle la climatización, el precio será menor que si queremos que al mismo tiempo controle la iluminación y otros electrodomésticos. Por ello es conveniente primero tener claro que es lo que queremos domotizar en nuestra casa.
Además, de esto, el precio también variará en función de si queremos una instalación cableada, o si por el contrario la queremos inalámbrica. Si estamos haciendo reforma o nueva construcción te recomendamos que te decantes por una instalación domótica por cables. Con ella ganaremos en fiabilidad, ya que los sistemas inalámbricos son más susceptibles de verse afectados por interferencias. Así todo es importante que te dejes asesorar por un profesional del sector.