El lacado de muebles consiste en aplicar una laca o esmalte en varias capas para conseguir un acabado liso y sedoso.
En este artículo vamos a enseñaros el paso a paso de cómo lacar un mueble en blanco, aunque también podéis seguir el proceso utilizando otro color.
Esmaltes para lacar un mueble
Antes de comenzar a lacar muebles, debemos elegir el esmalte que vamos a utilizar. En el mercado nos podemos encontrar con dos tipos de esmaltes donde elegir: los esmaltes sintéticos y los esmaltes acrílicos.
- Esmaltes sintéticos: son esmaltes con base de aceite. Son muy resistentes a la humedad y zonas de mucho tránsito. Para diluirlo o limpiarlo es necesario la utilización de aguarrás o disolvente. Su acabado es más profesional, pero debemos tener en cuenta que desprende bastante olor y tarda en secar. Se debe aplicar en zonas que podamos ventilar.
- Esmaltes acrílicos: son esmaltes con base al agua. Son más fáciles de manejar y limpiar, solo necesitaremos agua. Una vez secos, son resistentes a las manchas que se eliminan fácilmente con un trapo húmedo. Su secado es más rápido y también soportan la humedad. Su principal ventaja es que tiene tiempos de secado muy rápidos y apenas tienen olor.
Además del tipo, debemos elegir el acabado del esmalte. Podremos elegir entre un acabado mate, uno satinado y uno brillante.
El acabado mate disimulará las imperfecciones, el satinado es perfecto para colores claros por su acabado sedoso y el brillante se suele aplicar en madera de exterior pero debemos tener en cuenta que, a mayor brillo, más se notarán las imperfecciones.
Paso a paso de cómo lacar un mueble en blanco
Paso 1
Antes de lacar un mueble en blanco, debemos retirar los elementos del mueble que no queremos pintar como los pomos o las bisagras. También los podemos cubrir con cinta de carrocero.
Paso 2
Para que el esmalte quede homogéneo y liso, debemos preparar la superficie. Si nuestro mueble tiene una capa de pintura o barniz anterior en mal estado, tendremos que decaparlo. Para ello, podéis ver el paso a paso detallado aquí: diferentes formas de decapar madera.
En nuestro caso, lijaremos con una lija de grano fino para quitar el brillo del barniz. De este modo, el esmalte se adherirá mejor y el resultado será más regular.
Paso 3
Tras limpiar el polvo con un trapo humedecido, miramos si nuestro mueble tiene desperfectos.
En el caso de que notemos imperfecciones, las reparamos aplicando masilla con una espátula y lijando muy suavemente la zona.
Paso 4
A continuación, aplicamos una capa de imprimación con un rodillo o una brocha. Esta capa cierra el poro de la madera y evita que absorba el esmalte. De este modo, el esmalte se agarrará mejor al mueble y el acabado será mucho más uniforme y liso.
Paso 5
Cuando la imprimación se seque, lijamos el mueble con una lija de grano fino suavemente y retiramos el polvo.
Paso 6
Es el momento de lacar el mueble. Si hemos elegido un esmalte sintético, es probable que tengamos que diluirlo con disolvente o aguarrás según las indicaciones del fabricante. De lo contrario, si hemos optado por un esmalte acrílico este paso no será necesario.
Paso 7
Aplicamos una primera capa de esmalte blanco con un rodillo para lacar o una pistola para pintar. Debemos evitar el exceso de esmalte. En las zonas más finas o de difícil acceso podemos utilizar una paletina.
Paso 8
Cuando el esmalte se haya secado, lijamos suavemente el mueble y retiramos el polvo.
Paso 9
Aplicamos una segunda capa de esmalte blanco y dejamos secar. En nuestro caso, solo hemos necesitado dos capas para conseguir el resultado deseado, pero podéis repetir el mismo proceso hasta conseguir el resultado deseado.
Paso 10
Finalmente, aplicamos con un trapo una cera de lacado incoloro por el mueble para mejorar el resultado. De este modo protegeremos el mueble y mejoraremos su aspecto final. Como veis siguiendo el paso a paso de cómo lacar un mueble en blanco lo conseguiremos sin problema.
Cómo lacar un mueble en blanco: consejos y trucos
- El lacado con pistola es el que da mejores resultados. No quedarán marcas y se pueden pintar todos los recovecos fácilmente.
- Debemos retirar el polvo entre capa y lijado con un paño suave que no suelte pelusa. Esto hará que el acabado sea liso, suave y sedoso.
- Si es la primera vez que lacas muebles, lo ideal es que te decantes por el esmalte acrílico. Esto se debe a que es más fácil de utilizar, ya que no se debe diluir en disolvente. Además, se limpia con agua y su secado es más rápido.
- Antes de aplicar una nueva mano de esmalte, debes asegurarte de que la superficie está seca y limpia.
- Si optamos por pintar con rodillo o brocha, debemos cambiar el ángulo de aplicación entre capa y capa.