Cómo pintar radiadores paso a paso

Con el paso del tiempo, es probable que los radiadores de nuestra casa adquieran una tonalidad amarillenta que desentona con la decoración. Sin embargo, es posible pintarlos de otro color o devolverles su aspecto original de manera sencilla. La clave está en elegir el producto adecuado: un esmalte resistente a las altas temperaturas que puede llegar a coger un radiador encendido garantizándonos así que el color se mantenga intacto.

A continuación, te ofrecemos una solución rápida, económica y efectiva para renovar tus radiadores y lograr que se integren perfectamente en la decoración de cualquier habitación. Te enseñamos paso a paso cómo pintar radiadores que se encuentra en mal estado. ¡Lo dejamos como nuevo!

Herramientas

• Lija de grano fino.
• Rodillo.

Herramientas

• Trapos.
• Alcohol.
• Cinta de carrocero.
• Esmalte especial para radiadores.
• Papel protector.

Cómo pintar radiadores paso a paso

Paso 1 - Elección del esmalte

Comienza eligiendo el tono del esmalte, puedes optar por un color que combine con la pared para disimular los radiadores o por un tono que destaque si buscas darle un toque decorativo diferente. El esmalte debe ser resistentes a altas temperaturas.

Paso 2 - Proteger la superficie

Antes de empezar a pintar radiadores, comprueba que el radiador que vas a pintar está apagado y protege las zonas que no quieres pintar como el suelo la llave o el purgador.

Paso 3 - Prepara el radiador

A continuación, para que el esmalte agarre mejor, lija la superficie con una lija de mano de grano fino.

Paso 4 - Limpiar el radiador

Una vez lijado, pasa un trapo humedecido en alcohol para retirar el polvo que se ha producido al lijar.

Paso 5 - Aplicar una capa de esmalte

Cuando el radiador este totalmente seco, remueve bien el esmalte y aplica una primera capa en el radiador con un rodillo. Lo ideal es optar por un esmalte al agua resistente a las altas temperaturas.

En las zonas de difícil acceso utiliza una paletina larga y acodada.

Paso 6 - Aplica una segunda capa de esmalte

Cuando la primera capa se haya secado, aplica una segunda capa. Es importante respetar los tiempos de secado entre una y otra capa.

Después de que la segunda capa esté seca, ya podrás utilizar tu radiador como de costumbre.

Consejos para pintar radiadores

• No pintar un radiador caliente: pinta los radiadores cuando estén fríos. Si se pintan estando calientes la pintura se secará de manera irregular y la pintura se puede agrietar.
• Aplica capas finas de esmalte: aplica capas finas para garantizar un acabado uniforme y liso, evitando goteos.
• Utilizar pintura resistente al calor: la pintura debe resistir las altas temperaturas que alcanza el radiador. De lo contrario se puede decolorar y agrietar.
• Imprimación previa: si el radiador está muy deteriorado puedes optar por aplicar una imprimación especial previa para que la pintura agarre mejor. Esto ayudará a sellar la superficie y a mejorar la adherencia de la pintura.
• Ventila la estancia y utiliza guantes: al pintar radiadores, especialmente en interiores, asegúrate de que la habitación esté bien ventilada para evitar la acumulación de olores o vapores de la pintura. Además, usa guantes para proteger tus manos de posibles manchas o irritaciones.
• Pintura en spray: si optas por pintar el radiador con pintura en spray , mantén una distancia de al menos 20 centímetros entre el radiador y el spray. Aplica capas finas y constantes para evitar goteos y lograr un acabado uniforme.
• Decapar radiadores antiguos: si tu radiador es de hierro antiguo y tiene varias capas de pintura vieja, lo más recomendable es decaparlo antes de pintar. Para ello, utiliza un decapante especial que elimine las capas anteriores, dejando la superficie lista para recibir la nueva pintura.

¿Qué tipo de pintura se usa para pintar radiadores?

La pintura más adecuada para radiadores es la pintura anticalórica, diseñada específicamente para soportar temperaturas extremas. Esta pintura se elabora con un esmalte de base sintética, compuesto por resinas y pigmentos que permiten soportar temperaturas de entre 350°C y 900°C.

Este tipo de pintura es ideal para radiadores de hierro o acero, ya que su resistencia y durabilidad garantizan un acabado de calidad, sin que la pintura se agriete o decolore con el paso del tiempo. Además, es apta para interiores y exteriores, ofreciendo una gran capacidad de adherencia en todo tipo de superficies metálicas.