Esta es la planta que los jardineros piden no volver a plantar (y no lo dicen por capricho)

Existen decisiones que parecen del todo inofensivas. Como, por ejemplo, elegir una planta bonita. Pero en ocasiones, lo que comienza por ser una buena idea de cara a embellecer el jardín termina siendo una pesadilla. Y este es uno de esos casos. Una de las reinas del jardín se ha quedado sin corona.
Al parecer, esta planta ya no tiene sitio en el jardín moderno. Son muchos los jardineros que han decidido dejar de plantarla y no es por una moda pasajera, para nada. El motivo podría estar relacionado con el agua, el clima y una dura lección aprendida a base de fracasos y alguna decepciones. Su tiempo ha pasado. Mantenerla en condiciones es una misión casi imposible. Como las de Tom Cruise.

El problema no está en la planta... está en el clima
No hablamos de una especie exótica ni tampoco de una rareza botánica. Al contrario, es una planta muy común en España, de esas que seguro has visto en el jardín de tus padres, abuelos o vecinos. Pero lo que funcionaba antes, ya no lo hace ahora.
Durante los últimos años, las temperaturas se han disparado. El denominado cambio climático que tan bien conocemos. Los periodos de sequía son cada vez más largos y la humedad ambiental brilla por su ausencia. El calor se ha convertido en el protagonista principal, no da tregua ni por la noche, lo que provoca que algunas plantas no puedan recuperarse.
Es en este momento cuando entra en escena la protagonista de nuestro artículo: la hortensia. Sí, esa flor vistosa, redondeada y frondosa que parece sacada de una postal de verano.
La misma que hace algún tiempo se plantaba sin dudar, ahora se ha convertido en una especie complicada de mantener con vida. Y no es por falta de cuidados, sino porque la naturaleza ya no está de su parte.
¿Por qué la hortensia ya no encaja en el jardín actual?
Comencemos por el principio, como no podría ser de otra forma. La hortensia necesita mucha agua, demasiada. Es una planta que demanda riegos frecuentes, tierra húmeda y sombra parcial. Y cuando no consigue lo que quiera, lo hace notar: flores marchitas, hojas quemadas, tallos caídos y enfermedades varias, etc.
Pero lo más preocupante de todo es ni siquiera con riegos diarios sobrevive a las temperaturas propias de los veranos actuales. Muchos jardineros aseguran que han llegado a perder más del 70% de sus hortensias, a pesar de que las han regado y cuidado de forma diaria.
Confirman que, en muchos casos, el esfuerzo por salvarlas acaba siendo contraproducente. ¿El motivo? El exceso de agua favorece la aparición de hongos y asfixia las raíces.
Sin olvidarnos del aire seco, que tampoco ayuda. Ni siquiera las zonas sombreadas ofrecen ya la solución necesaria. En definitiva, la hortensia no está diseñada para este nuevo paradigma climático.
¿Entonces hay que renunciar a los jardines bonitos?
No, en absoluto. Lo que proponen los jardineros es adaptarse, en ningún caso rendirse. La idea es cambiar unas especies por otras que congenien mejor con el clima actual. Plantas que no te hagan sufrir cada verano ni te obliguen a regar como si tuvieras un pozo en casa.
Pero escucha lo mejor: una gran parte de estas alternativas no solo resisten mejor el calor, sino que además son preciosas y fáciles de cuidar.

Plantas que sí recomiendan los expertos:
- Salvia rusa: duradera, elegante y perfecta para climas secos.
- Lavanda : aromática, resistente y con un color inconfundible.
- Ceanoto: o Iilá silvestre, aporta un aspecto con poco esfuerzo.
- Sedum : todo un clásico dentro del jardín resistente, perfecto para quienes no buscan complicaciones.
- Pastos ornamentales: otorgan estructura, movimiento y resisten casi todo.
Con estas especies botánicas, te aseguras un jardín bonito durante todo el año, incluso en los meses más duros del invierno (o verano). Sin olvidarnos de que, de paso, ahorras en abono, agua y frustraciones.
El cambio es inevitable (y necesario)
Algunos lo llaman evolución; otros, sentido común. La cuestión principal es que todos los expertos consultados coinciden en lo mismo: seguir plantando hortensias es parecido a nadar contra corriente. ¿Qué te parece esta metáfora?
De otra forma, harás un gasto constante de recursos y energía para lograr resultados cada vez más pobres. Y sí, la hortensia es conocida por ser la flor de nuestras abuelas. Pero quizás no sea la mejor compañera en estos tiempos que corren.