Plantas
Cultivar lechugas es una de las tareas más sencillas en horticultura, son ideal para macetas y se protegen bien de los ataques de babosas y caracoles. Hay una amplia gama de semillas y las especies que permiten ir cortando las hojas a medida que se consumen tardan apenas una semana en crecer.
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Hogarmania, 7 de marzo de 2022
Nombre común: Lechuga
Nombre científico: Lactuca Sativa
Origen: India (aunque los botánicos no se ponen de acuerdo)
Familia: Asteraceas
Exposición: Clima fresco
Ubicación: Exterior
Temperatura: Depende del tipo de lechuga
Riego: Dos veces a la semana
Abono: Materia orgánica cada año
Las lechugas no solo son deliciosas en las ensaladas, además quedan muy decorativas en macetas. llena un tiesto, pequeño o grande, con sustrato universal y planta las semillas en la superficie dejando espacio para que crezcan. En los contenedores pequeños, planta tres o cuatro semillas de lechuga mantecosa, romana e iceberg, que tiene forma de corazón, o siembra abundantemente variedades cuyas hojas se puedan ir cortando, pues las irás acabando progresivamente.
Puedes plantar algunas macetas cada semana para asegurarte el suministro a lo largo del verano, pero recuerda que las semillas no germinan a temperaturas superiores a los 25ºC. Cuando los brotes de las variedades con forma de corazón alcancen un tamaño que lo permita, espácialos según las instrucciones del paquete de semillas.
Mantén siempre las lechugas bien regadas, especialmente si hace calor, cuando deberás hacerlo a diario, o traslada las macetas a un lugar en sombra en pleno verano. La falta de agua o el exceso de calor hacen que la planta se espigue y produzca hojas amargas.
Tampoco debes permitir que se encharque el sustrato: las lechugas se pudren. Los sustratos universales contienen los nutrientes necesarios para que las lechugas prosperen durante algunas semanas trascurridas las cuales deberás reforzarlo con fertilizante rico en nitrógeno para plantas de hoja. Sus peores azotes son las babosas y los caracoles. Inspecciona bien y a menudo las plantas y elimina a los intrusos.
Deja que la lechuga mantecosa y las variedades de hoja rizada maduren hasta convertirse en cogollos de hojas maduras y córtalas por la base con la ayuda de un cuchillo afilado. Otras variedades permiten ir recolectando las hojas a medida que se necesitan, cortándolas una a una a pocos centímetros de la base. Crecerán hojas nuevas que le darán una segunda cosecha. También puedes ir recolectando hoja por hoja.