Diseño de jardín rectangular

A la hora de distribuir las plantaciones lo primero que se tuvo en cuenta es donde ubicar el camino. Se optó por una linealidad casi centrada, en paralelo a una línea de setos que marcan los límites del jardín. También se diferenció dos zonas, una sombría y otra soleada. La zona sombría se consiguió gracias a una doble linealidad de cerezos y la zona soleada se constituye con unos manzanos y un banco para el disfrute del jardín. Así, ha bastando colocar dos tipos distintos de árboles para crear dos zonas bien diferencias del jardín.

En la parte superior del jardín se utilizo el boj, una variedad de seto, para contener el jardín y unas decorativas gramíneas, que necesitan poco mantenimiento y sólo tendremos que realizar una poda de mantenimiento a finales del invierno. Delante de las gramíneas se colocó un banco enmarcado entre dos manzanos, con orientación sur, y en su parte trasera se colocó una estructura completamente cubierta por hiedras. A ambos lados del banco se colocó también una lavanda, que dará un aroma cálido a nuestro jardín. En este caso, no se podó debidamente la lavanda tras la floración y quedó prácticamente irrecuperable. 

Los cerezos formarán una cubierta que proporcionará una floración blanca espectacular en primavera y sombra en verano. El pequeño desnivel se solventó con un desmonte con unas traviesas que contienen la tierra y que permitió hacer un camino de piedra. La pachysandra es la planta tapizante elegida para cubrir el jardín, que necesita tierras sueltas para ofrecer un cubrimiento homogéneo.