Dormancia en plantas, ¿por qué no mueren, solo reposan?

Estoy seguro de que la llegada del frío ha cambiado la forma en la que nos relacionamos con nuestras plantas. A diferencia de la primavera, cuando vemos que nuestras plantas tienen una actividad frenética, todo se calma e incluso se detiene durante el invierno. ¿Por qué ocurre esto?
En este artículo te hablo sobre la dormancia, qué diferentes formas tiene este mecanismo y cómo adecuarnos a ella. ¿Te interesa?
¿Qué es la dormancia en las plantas?
Podemos definir a la dormancia como un mecanismo biológico de resistencia ante condiciones adversas, donde el objetivo principal es el ahorro de energía durante un periodo en el que la planta no dispone de los recursos necesarios para crecer eficientemente.
Se trata de un mecanismo en el que las plantas (y también los animales) entran en un estado de reposo en el que hay una gran reducción de las actividades relacionadas con el desarrollo del organismo, habiendo una suspensión temporal casi total de la actividad metabólica.
Debemos entenderlo como que durante este periodo las plantas entran en un estado de reposo donde no mueren, pero tampoco crecen.

Este mecanismo se suele activar ante determinadas condiciones ambientales adversas que no permiten el desarrollo de la planta.
Por este motivo, es habitual que las plantas inicien su dormancia cuándo va a comenzar el invierno, ya que el descenso de las temperaturas y el menor número de horas de luz dificultan el correcto desarrollo de estas formas de vida.
Sin embargo, qué condiciones se consideren adversas dependen de cada planta y de cómo es el ecosistema en el que se ha desarrollado y para el que está adaptada.
Tipos de dormancia
Podemos agrupar las diferentes dormancias que encontramos en el reino vegetal en función de a qué fase de la planta afecta o cómo ha reaccionado la planta para comenzar este proceso.
¿Qué fase de la planta entra en dormancia? Los árboles (entendiéndolos como la fase adulta de las plantas) no son el único momento en el desarrollo de una planta en el que puede aparecer la dormancia, sino que las semillas también pueden experimentar este proceso. Te explico cómo afecta a cada estado de la planta:
Dormancia en las semillas
Aunque quizás aún no lo hayas relacionado con la temática de este artículo, los aficionados a la jardinería nos hemos enfrentado a la dormancia en las semillas en decenas de ocasiones.
Este estado es muy sencillo de reconocer en las semillas, ya que es el responsable de que semillas viables no germinen.
En este caso, el objetivo de la dormancia es impedir que las plántulas aparezcan antes de que las condiciones ambientales sean las adecuadas para que la planta pueda comenzar a desarrollarse, puesto que las primeras semanas después de la eliminación son cruciales.

Esto, que es una gran ventaja evolutiva en la naturaleza, suele darnos problemas cuando queremos trabajar con determinadas especies en los meses fríos.
¡Las plantas aún no han entendido que los aficionados a la jardinería tenemos invernaderos en casa! Por suerte, saber cómo funciona esta dormancia nos permite sortearla. Esta dormancia puede ser física o fisiológica:
- Dormancia física: es cuando la cubierta de las semillas es impermeable al agua y/o a los gases, lo que impide que el proceso de germinación se active. En este caso solemos recurrir a la escarificación, un proceso mediante el cual dañamos la cubierta de la semilla y así inducimos la germinación.
- Dormancia fisiológica: es normalmente provocada por inhibidores químicos que genera la propia semilla para impedir su germinación. En estos casos se opta por la estratificación, un proceso mediante el cual exponemos a las semillas a bajas temperaturas, simulando el invierno.
Dormancia en los árboles
Como hemos comentado, en el caso de las plantas maduras la dormancia aparece como una reducción de la actividad metabólica que se trasmite de manera evidente en una detención del crecimiento de sus raíces, ramas y hojas.
¿Qué desencadena la dormancia en las plantas?
Aunque la dormancia es un proceso bien definido y con idénticas consecuencias en todas las plantas, no en todas ellas se pone en marcha de la misma manera ni por los mismos motivos. Te explico las diferencias:
Dormancia predictiva
La dormancia predictiva ocurre en aquellas plantas que son capaces de adelantarse al cambio ambiental y comienzan a activar este mecanismo de reposo antes de que ocurra.
Esto es habitual que ocurra en plantas que pertenecen a ecosistemas en los que las estaciones están bien definidas, por lo que las plantas han evolucionado para adaptarse de la mejor manera posible a estos cambios cíclicos.

Un ejemplo muy evidente de este proceso lo encontramos en los árboles caducifolios o en las plantas bulbosas. En el primer caso, estos tipos de árboles habitualmente comienzan con su característica pérdida de sus hojas durante el otoño, cuando las condiciones ambientales han comenzado a cambiar, pero aún no podríamos considerarlas como adversas.
¿Por qué? Porque para estas plantas es más eficiente desde el punto de vista de los recursos perder sus hojas y volver a producirlas cuando las condiciones vuelven a ser más óptimas que mantenerlas durante todo el invierno.
Esta dormancia se activa gracias al reloj biológico interno de las plantas, que sigue el ciclo circadiano y que puede adelantarse a las condiciones adversas recurrentes.
Dormancia consecuente
La dormancia consecuente ocurre en aquellas plantas que inician el proceso de dormancia una vez que las condiciones ambientales ya han cambiado.
Esto ocurre en ecosistemas donde no existen un cambio estacional tan marcado ni paulatino y sus condiciones climáticas son más impredecibles. Por ejemplo, esto podemos verlo en aquellas plantas que pierden sus hojas de manera más o menos repentina durante una sequía o durante un descenso acusado de las temperaturas.
¿Cómo debemos tratar a nuestras plantas durante la dormancia?
Durante la dormancia la planta paraliza todos sus sistemas, por lo que muchas tareas que llevamos a cabo para cuidar a nuestras plantas, que en estos momentos debemos evitar o, al menos, reducir. Te dejo algunos consejos:
Riega poco
Debido a la disminución de la actividad metabólica y a que, en general, no se están generando nuevos tejidos, las plantas no requieren tanta agua para sobrevivir.

Esto es especialmente importante en las plantas caducifolias, ya que la pérdida de las hojas dificulta, enormemente, la absorción de agua por parte de las raíces, por lo que podría haber una acumulación de esta agua en el suelo, que fácilmente podría provocar la aparición de hongos.
No fertilices
La fertilización tiene como objetivo suministrar los nutrientes necesarios para que la planta crezca, por lo que, si la planta se encuentra en una fase en la que no tiene crecimiento, esto no es necesario. Si fertilizamos durante este periodo, lo único que estaremos haciendo es perder los nutrientes cada vez que reguemos.
Trata de evitar las podas
Una recomendación general es podar justo cuando la primavera vaya a comenzar, de manera que concuerde con la salida de la dormancia. Esto se debe a que, si la planta se encuentra en estado de reposo, no va a poder sellar las heridas que le generemos con las podas, por lo que estas serán fácilmente colonizadas por patógenos.
Como has visto, la dormancia es un mecanismo muy importante de las plantas y que debemos saber reconocer para adecuar la forma en la que nos relacionamos con ellas.