En el mercado hay un montón de rosales con distintas variedades: unos son altos, otros pequeños, con flores de diferentes colores, con crecimiento horizontal, trepadores, etc.
Por un lado podemos encontrar los rosales tapizantes o Rosa Europeana. Esta variedad de rosal tiene un crecimiento horizontal y hacen la función de cubresuelos. Tiene una mata baja pero ancha con flores pequeñas y es una planta bastante florífera.
Otra variedad de rosales es la Rosa Queen Elisabeth. Estos son rosales de pie alto que pueden alzanzar el metro o metro y medio de altura. Suelen tener distintos tipos de flores, pero en general tienen muchos pétalos y una gran fragancia.
Por otro lado, está también la rosa más tradicional o los Híbridos de Té. Este tipo de rosal se caracteríza por tener una flor perfecta pero en cuestión de floración no suelen ser muy floríferos.
Además de las variedades que acabamos de ver podemos encontrar otros rosales de otro tipo: los rosales trepadores. Estos se caracterízan por tener una potente floración en primavera, pero solo con una flor, es decir, una sola floración.
Si queremos realizar la plantación de alguna variedad de estos rosales trepadores, lo mejor es realizarla alrededor de alguna estructura para que la planta pueda trepar por ella. De esta manera la estructurá hará de guía y los rosales treparán por ella.
El primer paso será hacer el hoyo de plantación y a continuación introducir sustrato específico para rosales. También habrá que introducir abono y fertilizante específico para rosales. Por último podemos realizar un acolchado en la base de la plantación con el sustrato que nos sobre. De esta manera tan sencilla hemos realizado la plantación de los rosales que florecerán a mediados o finales de la primavera.