Seto de arces japoneses
En este consejo de jardinería, Iñigo Segurola nos enseña cómo crear un seto utilizando arces japoneses. ¡No te lo pierdas!
Uno de los árboles que mejor otoño tiene y que más gusta a nuestro presentador, Iñigo Segurola, es el arce japonés.
Es arce japonés es el normal, es de hoja verde. Cuando llega el otoño se da el cambio de coloración. La clorofila se retira y aparecen los carotenos, que son los pigmentos responsables de dar estas tonalidades naranjas, amarillas y rojas a las hojas de los árboles en otoño.
Esta pigmentación se acentúa si tenemos contraste térmico entre día y noche, como por ejemplo, en días donde la temperatura alcanza los 15-16ºC. y a la noche rozan los 0-3ºC. Hay variedades de arces japoneses que se caracterizan por tener un otoño completamente amarillo. Otros, como los de la variedad de Acer palmatum osakazuki, tienen la coloración más roja del otoño.
Seto de arces japoneses
Iñigo Segurola nunca había visto un seto de arces pero, en su pueblo, observó que los jardineros habían cortaron unos arces en forma de bola.
Se fijó que, tras ella, el arce japonés desarrollaba unos brotes súper largos, bastante anárquicos. Esta idea le motivó a crear el seto con arces japoneses de hoy.
Se plantaron a unos 50 cm cada ejemplar y según van creciendo, vamos haciendo incisiones. Este año solo se ha podado una vez. Tras esa poda, la brotación que ha desarrollado el arce es superior a un metro. Si hubiese habido una segunda poda, hubiésemos conseguido una mayor densidad.
Cuando acaba la coloración otoñal y pierde todas las hojas, se recorta. Así, para el próximo año, tendrá una brotación primaveral estupenda.
