Reproducir hiedra por acodo

El acodo es una técnica de reproducción que consiste en aprovechar la fuerza de la planta madre y meter una de las ramas de esa planta madre en tierra para que eche raíces. La planta madre va a ir alimentando al brote que metamos en la tierra y, cuando ya esté lo suficientemente fuerte, bastará con cortar la unión para tener una planta nueva. Es una técnica muy sencilla y que, además, casi siempre da resultado.

Por lo tanto, esta es una técnica perfecta para reproducir la hiedra ya que de por sí es una planta que hace raíces en los tallos. Para ello, basta con introducir en un tiesto más pequeño una de las ramas de la hiedra, enterrando el brote bajo tierra. Con el tiempo, veremos cómo ese brote ha crecido y podremos cortar la unión a la planta madre. Mientras tanto, la conexión que tiene con la planta madre será lo suficientemente fuerte para mantenerla alimentada.

La hiedra es una planta muy resistente y fácil de cuidar. Toleran exposiciones no excesivamente luminosas, aunque su desarrollo óptimo lo tienen en condiciones de luz abundante, sin sol directo. Le gustan las temperaturas frescas y el sustrato ligeramente húmedo.