¿Los perros pueden enamorarse? Lo que dice la ciencia

Sin duda alguna, los perros son animales conocidos por su lealtad y cariño hacia sus dueños, pero ¿pueden enamorarse? Sin bien es cierto que no experimentan el amor romántico como los humanos, diversos estudios han demostrado que sí son capaces de formar vínculos afectivos con otros perros, personas y otras especies. La clave reside en la oxitocina, la famosa hormona del amor.
La oxitocina: la base del vínculo entre perros y humanos
Por tanto, la oxitocina es la hormona clave en la creación de vínculos o lazos emocionales. En el caso de los humanos, está relacionada con el amor, el apego y la confianza.
Son muchos los estudios que ya han demostrado que los perros también liberan oxitocina cuando interactúan con sus dueños o con otros animales a los que les une un vínculo cercano.

¿Los perros sienten amor o es solo apego?
En primer lugar, conviene distinguir que el amor, tal y como lo entendemos los humanos, implica conceptos abstractos y emociones un tanto complejas. En el caso de los perros, estos demuestran afecto y apego a través de comportamientos que fortalecen sus relaciones, como por ejemplo:
- Juego y cercanía con otros perros y humanos.
- Acicalamiento mutuo en señal de confianza
- Dormir cerca de quienes consideran su familia.
- Mirada prolongada con sus dueños (el nivel de oxitocina se incrementa en ambos).
El vínculo entre perros y humanos: más fuerte de lo que creemos
Otras investigaciones realizas han revelado que los perros son capaces de experimentar emociones parecidas a las nuestras, como alegría, tristeza e incluso, dueño tras la pérdida de un ser querido.
Pero esto no es todo, puesto que un estudio realizado por el profesor Stanley Coren en Psychology Today afirma que los perros experimentan cambios hormonales similares a los humanos en diversos contextos y estados emocionales.
Una conclusión que refuerza la idea de que los perros son capaces de sentir una conexión genuina con sus dueños y con otros miembros de su entorno.
¿Cómo demuestran amor los perros?
Como podía ser de otra manera, los peludos no expresan su amor con palabras ni regalos, pero sí con acciones. Normalmente, demuestran afecto de las siguientes maneras:
- Seguir a su dueño a todas partes, mostrando un interés constante en su bienestar.
- Miradas directas, capaces de generar intimidad y confianza con los humanos.
- Mover la cola de una manera relajada y alegre al ver a alguien que quiere.
- Lamer y acicalar, un comportamiento similar al que practican los lobos en la naturaleza.
- Dormir encima o cerca de sus dueños, una señal de total confianza y seguridad.
A pesar de que el concepto de enamoramiento, tal y como lo conocemos, no es igual al de los humanos, la ciencia ha confirmado que los perros experimentan vínculos afectivos fuertes y liberan oxitocina en respuesta a sus seres queridos. Mucho se habla sobre el tiempo que tarda un perro en quererte, pero lo que está claro es que depende sobre todo de ti.
¿Qué sugiere esta conclusión? A su manera, los perros sí que son capaces de enamorarse de quienes les brindan amor y seguridad en su día a día. ¿Recuerdas cuál es la mejor manera que hay para captar la atención de tu perro según la ciencia? Ponla en práctica y verás lo bien que funciona.

Los vínculos emocionales en los perros
¿Los perros pueden tener pareja o una relación exclusiva?
En la naturaleza, los perros no forman parejas monógamas con ciertas especies de lobos o aves. Aunque sí pueden desarrollar vínculos muy fuertes con algunos perros y preferir su compañía por encima de otros.
¿Cómo sé si mi perro prefiere a otro perro en el parque?
Si cuando vas al parque tu perro busca constantemente a un compañero en particular, juega de manera relajada y equilibrada con él, o incluso le sigue cuando se va, es una clara señal de que tiene una conexión especial con ese perro.
¿Los perros pueden sentir celos si su dueño acaricia a otro perro?
Sí, los perros pueden tener comportamientos parecidos a los celos. Si notas que tu perro intenta interponerse entre tú y otro perro, ladra o busca llamar tu atención, puede estar expresando cierta incomodidad o necesidad de apego.