La mejor forma de llamar a un gato no es pspsps, según la ciencia
Aquellas personas que tienen un gato en casa seguro que lo saben: no son animales fáciles de convencer. Porque a diferencia de los perros, que acuden rápidamente cuando los llamas (no siempre, vale), los gatos parece que cuentan con su propio criterio. ¿Verdad?
Pero no desesperes si llamas a tu gato y no te hace caso o te bufe. Un reciente estudio ha revelado que sí existe una manera eficaz de llamar a un gato (y que reaccione), pero que no tiene nada que ver con el popular pspsps. Para ser sinceros, a mí este reconocido método nunca me ha funcionado.
A pesar de que este gesto universal puede resultar un tanto divertido, no es el más efectivo. La ciencia ha estudiado qué señales funcionan mejor a la hora de atraer la atención de un felino. Las enumeramos a continuación. Esperamos que a partir de ahora tengas más suerte. ¡Sigue leyendo!
Qué dice la ciencia sobre llamar a un gato
Un experimento con señales humanas
Investigadores de la Universidad de Nanterre (París), observaron el comportamiento de diversos gatos dentro de un espacio controlado, concretamente un café para gatos. ¿El objetivo? Medir la reacción de los felinos cuando un humano desconocido intentaba llamar su atención.
Vocal, visual o ambos
El estudio clasificó las interacciones en tres modalidades diferentes:
- Visuales: como mirar directamente al gato o extender una mano.
- Vocales: decir pspsps , gatito o cualquier otro sonido.
- Bimodales: una combinación de diversas señales visuales y vocales.
¿El resultado? Los gatos participantes en este estudio respondían con mayor frecuencia y más rápido cuando se empleaban señales visuales o bimodales (voz + gestos).
Lo que deja una conclusión: no es suficiente con hablarles, sino que hay que establecer contacto visual, haciendo gestos suaves o acercando la mano. Esta clase de comunicación redujo el tiempo de respuesta del minino, que también mostraba una actitud más tranquila.
Por qué lo visual gana terreno
Una mirada lo dice todo
El citado estudio concluyó que los gatos confían mucho más en las señales visuales, sobre todo cuando se trata de humanos que no conocen. Esto se debe a que son capaces de evaluar mejor la intención de una persona cuando observan su lenguaje corporal.
Ignorarlos puede estresarlos
Un dato importante que se desprende de este estudio es que cuando los felinos eran ignorados por los humanos, mostraban algunos signos de estrés, como mover la cola con fuerza. De esta manera, se demuestra que no solamente observan, sino que si se sienten rechazados, su estado emocional se ve afectado.
¿Por qué los gestos funcionan mejor?
Como bien sabrás, si eres un amante de los gatos, es que son observadores por naturaleza y ven a los humanos de una forma un tanto curiosa. A lo largo de la domesticación, estos animales han aprendido a interpretar algunos gestos humanos, como el movimiento de las manos o la dirección de la mirada.
Cuando alguien les habla sin mirarlos o sin gesticular, la gran mayoría de los felinos (por no decir todos), se muestran del todo indiferentes. En cambio, si la misma persona se agacha, les habla con voz suave o les extiende la mano, el gato lo interpretará como una invitación amistosa.
Cómo aplicar esto en casa
Si es tu gato: usa su nombre y sonidos familiares
Con gatos conocidos, la comunicación vocal sí funciona, especialmente si asocian tu voz con algo positivo. Hacer sonar una lata de comida, llamarles por su nombre o sacudir una bolsa de pienso, son sonidos que atraerán poderosamente su atención.
Si es un gato desconocido: usa gestos suaves
Siéntate cerca del animal, parpadea lentamente o extiende la mano, verás como consigues llamar su atención. Pero evita realizar movimientos bruscos o mirarles fijamente, ya que podrían ser interpretados como una amenaza o desafío.
Combina señales
Aunque lo mejor es utilizar una señal bimodal, por ejemplo: acompaña tu voz con un gesto, como acercar la mano o hacer clics suaves con la lengua a la vez que se hace el contacto visual.
¿Y si mi gato se pierde?
En la incómoda situación de que tu gato se haya escapado o no lo encuentres por casa, prueba a hacer esto:
- Llámalo por su nombre empleando una voz calmada.
- Deja abierta una puerta o ventana.
- Emplea sonidos que sea capaz de reconocer (como una cuchara en su cuenco).
- Si crees que te ve desde algún escondite, realiza gestos visuales para llamar su atención.
- Permanece al menos 15-30 minutos cerca del sitio donde suele aparecer.
La combinación de diversas señales visuales y auditivas puede hacer que tu gato se sienta seguro y, por tanto, vuelva a tu lado.
¿Y si mi gato nunca viene cuando lo llamo?
En ocasiones tu gato no te ignore por capricho, sino porque en ningún momento ha aprendido a relacionar o asociar tu voz como algo positivo.
Con el fin de mejorar esta situación, prueba a poner en práctica los siguientes consejos:
- Emplea siempre el mismo nombre o palabra para llamarlo.
- Practica a dirigirte a él antes de darle comida o premios.
- Si viene, recompénsale , aunque solo sea con una caricia.
- No uses nunca su nombre para regañarlo.
Con el paso del tiempo, es muy probable que tu gato comience a responder mejor. Todo es cuestión de asociar, repetir y respetar su ritmo. Ten paciencia.
¿Y el pspsps?
A pesar de que en muchos lugares del mundo es una forma popular y divertida de llamar a tu gato, el conocido pspsps no es una técnica fiable ni efectiva.
Para la ciencia, los gatos no responden tanto como se piensa a este sonido, especialmente si proviene de una persona desconocida o no lo asocian a un premio o recompensa.
Así que si, como en mi caso, no te funciona, ¡ya sabes el motivo!
Los gatos sí te escuchan (pero a su manera)
La idea general de que los gatos no hacen caso no es del todo cierta. La cuestión es que procesan y reaccionar a los estímulos de una manera diferente a los perros. Por tanto, si sigues estas recomendaciones y aprendes a comunicarte en su lenguaje, tu pequeño felino entenderá mejor tus señales.
Recuerda: usa gestos suaves, un tono relajado y sé constante. Ah, y sobre todo, ten paciencia.