Ingredientes (4-6 personas):
- 350 g de champiñones
- 1 cebolla
- 1 diente de ajo
- 50 ml de vino dulce (Pedro Ximénez)
- 1/2 limón
- 80 g de queso cremoso
- 60 g de mantequilla (40g / 20g)
- 1/2 barra de pan
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- 1/2 cucharadita de tomillo seco
- 1/2 cucharadita de nuez moscada
- perejil
Elaboración de la receta Paté de champiñones y vino dulce paso a paso
Calienta una sartén con 2 cucharadas de aceite y 40 g de mantequilla. Pela la cebolla, córtala en daditos, agrégala y cocínala a fuego suave-medio durante 6-8 minutos.

Pon los champiñones en un bol, enjuágalos bien, retira y sécalos. Córtalos en láminas, incorpóralos a la sartén, sazona y cocínalos a fuego medio durante 6-8 minutos.

Añade el diente de ajo picado finamente, el tomillo y la nuez moscada. Vierte el vino y el zumo de limón, y cocina todo durante 5 minutos (reserva unas láminas de champiñón para decorar).

Introduce los champiñones en un vaso americano, agrega el queso fresco y tritura bien hasta conseguir una pasa cremosa.

Reparte la mezcla a dos botes de cristal (tipo conserva). Funde el resto de la mantequilla, cubre los patés, decóralos con las láminas de champiñón reservadas anteriormente y ciérralos. Introduce los botes en el frigorífico y deja que se enfríen bien.

Corta el pan en rebanadas finas y tuéstalas por los dos lados.

Sirve el paté y acompáñalo con las tostadas. Adorna los platos con unas hojas de perejil.

Consejos para hacer y conservar el paté de champiñones y vino
Si os gustan los patés, este os va a encantar. Además es una de esas recetas cómodas para días de celebración, ya que podéis dejarla preparada desde la víspera.
El paté combina bien con panecillos y tostas y si lo hemos elaborado en casa podemos conservarlo 5 o 6 días en la nevera.
Lo más recomendable es mantenerlo dentro de su propio envase, rodeándolo con film o una bolsita hermética, así evitaremos que se seque y lo consumiremos en los tres días siguientes a su apertura.
No nos confundamos con el foie-gras, ya que esta receta se compone de hígado de ganso, oca o pato hipertrofiado a través de los alimentos de los que se alimentan.