Pollo con champiñones y nata, las pechugas en salsa más jugosas

Las pechugas de pollo son perfectas para hacer recetas fáciles, rápidas y saludables. Para que te queden jugosas aquí te propongo sellarlas primero en la sartén y cocinarlas después en una sabrosa salsa de champiñones. Elaborada con un sofrito de ajo y cebolla, los champiñones se cocinan con una nata ligera para dar la cremosidad ideal a este plato.
Los champiñones blancos de Lidl son perfectos para cocinar en salsa por su frescura y textura firme. La clave es cortarlos en cuartos para darles presencia y crear jugosos bocados llenos de sabor. Sigue la receta paso a paso y prepara el pollo con champiñones y nata más tierno y cremoso. ¡Ideal para compartir toda la familia!
Raciones
4
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
10 m
Cocinado
25 m
Tiempo total
30 m
Ingredientes (4 personas)
- 4 pechugas de pollo enteras
- 400 g de champiñones blancos de LIDL
- 1 cebolla
- 3 dientes de ajo
- 200 ml de nata líquida de cocina ligera
- Sal, pimienta negra y nuez moscada
- Perejil fresco picado
- Aceite de oliva
- Una hoja de laurel

Elaboración paso a paso de la receta de pollo con champiñones y nata
1. Prepara los ingredientes
Pela los dientes de ajo y reserva. Pica la cebolla en trozos pequeños para que se mezcle bien con la salsa de nata y los champiñones.
Lava los champiñones frescos y córtalos en cuartos para que se note su presencia en cada bocado.

2. Sella las pechugas de pollo
Calienta una tartera (cazuela amplia y baja) con un chorro de aceite de oliva. Cuando el aceite esté bien caliente añade las pechugas de pollo enteras. Dóralas por ambos lados durante unos minutos para sellar la carne y retener sus jugos.
Retira las pechugas de la tartera y reserva en una fuente aparte.

3. Prepara la salsa
En la misma tartera, prepara la base de la salsa. Añade un chorro de aceite de oliva y agrega los dientes de ajo y la cebolla picada. Sofríelos a fuego medio-bajo hasta que estén ligeramente dorados.
Incorpora los champiñones, mezcla y cocina durante 5 minutos. Al dorarse y soltar sus jugos, los champiñones darán más sabor a la salsa.

4. Cocina el pollo en la salsa
Vuelve a introducir las pechugas de pollo en la tartera junto con el sofrito de ajo, cebolla y champiñones.
Vierte la nata líquida para crear una salsa cremosa. Añade pimienta negra, una hoja de laurel, un toque de nuez moscada y sal al gusto.
Tapa la tartera y deja cocinar a fuego bajo durante 10-15 minutos, hasta que la salsa espese y reduzca ligeramente.

5. Sirve el pollo con champiñones y nata
Retira el pollo de la tartera y córtalo en rodajas antes de salsear.
Sirve en cada plato una pechuga de pollo en rodajas cubierta con la salsa de champiñones y nata. Decora con un poco de perejil fresco picado para darle un toque de color y frescura. ¡Y listo!

Consejos para hacer el pollo con champiñones y nata perfecto
Los champiñones ideales
Los champiñones blancos, además de ser un producto delicioso, son muy versátiles en la cocina. Gracias a su textura firme son perfectos para cocinar en salsa ya que no pierden consistencia en la cocción al combinarse con la nata.
En esta receta se utilizan champiñones frescos de calidad de Lidl para aprovechar todo su sabor y sus nutrientes. Bajos en calorías y ricos en antioxidantes, son fuente de proteínas, vitaminas del grupo B y minerales como potasio y el fósforo. ¡Qué no falten en tu nevera!

La carne, dorada y jugosa
Para que las pechugas de pollo queden doradas por fuera pero tiernas y jugosas por dentro se cocinan enteras, ya que así mantendrán mejor sus jugos. Se sellan primero a fuego medio y se cocinan después en la salsa a fuego suave 10-15 minutos. Una vez cocinadas es cuando se corta la carne en rodajas para que absorban bien la salsa.
La salsa perfecta
En esta receta se aprovecha el jugo que sueltan los propios champiñones al cocinarlos en el sofrito de ajo y cebolla para dar más sabor a la salsa. Si quieres intensificar aún más el sabor puedes añadir caldo de pollo o un toque de vino blanco. No olvides aromatizar la salsa con hierbas y especias que realcen su sabor como pimienta negra, nuez moscada y laurel.
Para dar cremosidad se utiliza una nata líquida ligera, baja en grasa, pero también puedes usar leche evaporada. Para espesar la salsa, otra opción es añadir al final queso rallado (el parmesano es ideal) o incorporar una cucharada de harina de maíz diluida con agua fría. Deja reducir a fuego suave 10-15 minutos hasta conseguir el punto perfecto.
Preguntas frecuentes sobre la receta de pollo con champiñones y nata
¿Puedo hacer el pollo con champiñones y nata al horno?
Sí, el pollo al horno también está delicioso. Primero sella la carne y cúbrela con la salsa cocinada en la sartén, después hornea durante 20-25 minutos con el horno precalentado a 180°C. Además, puedes añadir queso rallado sobre el pollo antes de hornear y gratinarlo para un resultado más cremoso.
¿Con qué puedo acompañar el pollo con champiñones y nata?
Para equilibrar la cremosidad de la salsa, acompañamientos perfectos para este plato de pollo pueden ser un arroz blanco o unas verduras al vapor.
¿Cómo conservar esta receta de pollo en salsa?
Si te sobra, puedes guardar el pollo con champiñones y nata en un recipiente hermético en la nevera durante 2-3 días. Al recalentar, añade un poco más de nata o leche para que la salsa recupere su cremosidad.