Sopa de mijo

Una receta con muchísimas propiedades e ideal para afrontar cualquier resfriado en estos días de frío. Karlos Arguiñano nos enseña cómo cocinar mijo para preparar una riquísima sopa de mijo acompañada de verduras.
La elaboración es sencillísima y alimentará a toda la familia de forma muy económica. Así que anímate a hacerla con los ingredientes que nos propone Arguiñano (o cualquier otra verdura que os guste) y combate el frío sin tantas calorías.
Raciones
4
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
10 m
Cocinado
30 m
Tiempo total
40 m
Aunque Karlos Arguiñano usa un hueso de jamón para darle otro toque de sabor al caldo, podéis obviarlo y hacer la sopa de mijo solo con verduras para que forme parte de vuestros platos veganos. ¡Será la mejor receta para invierno!
Ingredientes para 4 personas
- 1 cebolleta
- 1 puerro
- 2 tallos de apio
- 2 zanahorias
- 1/4 de apio nabo, colinabo (250 gr.)
- 100 gr. de mijo
- 1 hueso de jamón
- 1,5 litros de agua
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- 1 cucharadita de cúrcuma
- 1 hoja de laurel
- perejil
Cómo hacer la sopa de mijo
Calienta una cazuela con 3 cucharadas de aceite. Corta la cebolleta en daditos y añádela. Limpia el puerro, retirándole la parte inferior, la superior y 2-3 capas de hojas. Enjuágalo bien bajo el grifo de agua, córtalo en daditos e incorpóralo a la cazuela.
Corta los tallos de apio de la misma manera y agrégalos. Pela las zanahorias, córtalas en cuartos de luna y añádelas. Pela el apio nabo, córtalo en dados e incorpóralo. Sazona y rehoga las hortalizas a fuego medio durante 8-10 minutos.
Añade el hueso de jamón, la hoja de laurel y la cúrcuma. Cubre todo con el agua y cuece las hortalizas a fuego medio durante 10 minutos.
Pon el mijo en un colador como el que usa Karlos Arguiñano, lávalo bien y escúrrelo sobre una fuente cubierta con papel absorbente.
Calienta una sartén sin aceite, agrega el mijo y tuéstalo un poco. Agrégalo a la cazuela y cuécelo durante 15-20 minutos.

Pon a punto de sal y sirve. Decora los platos con unas hojas de perejil.
Tips para una sopa de mijo perfecta
El mijo es un cereal de cocción rápida por lo que es muy fácil de cocinar. Eso sí, antes de cocinarlo, es imprescindible lavarlo y escurrirlo bien.
Luego, para potenciar su sabor y que aparezcan sus característicos toques de mantequilla y nuez, Karlos Arguiñano nos recomienda tostarlo ligeramente en una sartén y añadirlo inmediatamente en el agua caliente en que se están cociendo todas las verduras.
Esto nos garantizará que el mijo conserve su textura dentro de la sopita. Una vez pasados 15-20 minutos a fuegos suave, tendremos listo el mijo en la sopa con una textura de lo más esponjosa. Y una vez cocinado, desaparecerá por completo el ligero toque amargo que suele desprender.
Ten en cuenta que el mijo se suele cocer de forma irregular, por lo que algunos granos pueden quedar totalmente cocidos y abiertos mientras que otros permanecerán firmes y crujientes.
En caso de no tener mijo en casa, siempre podéis hacer una sopa de verduras con pasta o arroz. No obstante, como dice Karlos Arguiñano, el mijo tiene muchísimas propiedades.
Por otro lado, el colinabo (o apio nabo) tiene un similar sabor al brócoli o repollo y le dará un toque espectacular a nuestra sopa de mijo. No obstante, puedes aprovechar lo que sobra para cocinarlo como si fueran patatas cortadas en láminas o tiras (al horno, hervido, frito, en chips, en sopas o purés). ¡Aquí no se tira nada!