Cómo limpiar y desinfectar la escoba: guía para un hogar más limpio
Una escoba sucia deja la casa más sucia y con malos olores. No lo digo, yo dice la experiencia. ¿De qué nos sirve barrer la casa con una escoba mugrienta si mientras lo hacemos se irán desprendiendo de ella partículas y microbios? ¡De nada! Por lo tanto, limpiar la escoba es una tarea esencial para mantener tu casa impecable.
Algo que aprendimos de Monica Geller en Friends es la importancia de limpiar las herramientas de limpieza. Aunque parezca nimio, esto es esencial para asegurar que nuestro hogar se mantenga realmente limpio. Por ejemplo, una escoba sucia no solo es ineficaz para recoger la suciedad, sino que también puede redistribuir gérmenes y polvo en lugar de eliminarlos. De ahí que sea fundamental realizar un mantenimiento regular de la escoba y todos sus componentes.
Si no sabes cómo hacerlo, no te preocupes. En este artículo te explico, paso a paso, cómo limpiar y desinfectar la escoba utilizando productos comunes como jabón de lavavajillas y bicarbonato de sodio. ¡Toma buena nota!
Materiales necesarios para limpiar y desinfectar la escoba
- Cubo de la fregona
- Agua caliente
- Jabón de lavavajillas
- Bicarbonato de sodio
- Cepillo de cerdas duras
Pasos para limpiar y desinfectar la escoba
Sigue estos cuatro pasos para limpiar la escoba de barrer y dejarla impecable:
1. Separa el cabezal de la escoba
Antes de empezar, desenrosca y quita el palo de la escoba. Esto facilitará la limpieza de las cerdas y permitirá un acceso más fácil a todas las áreas que necesitan ser desinfectadas.
2. Prepara la mezcla de limpieza
Llena el cubo de la fregona con agua caliente, añade una pequeña cantidad de jabón de lavavajillas junto con 3-4 cucharadas de bicarbonato de sodio. La combinación de estos dos productos es perfecta para desinfectar y eliminar la suciedad acumulada en las cerdas de la escoba.
3. Sumerge y limpia la escoba
Sumerge la escoba en el cubo con agua, jabón y bicarbonato y déjala a remojo de 15-20 minutos. Asegúrate de que las cerdas estén bien empapadas. Después, utiliza un cepillo de cerdas duras (o un peine viejo) para limpiar las cerdas de la escoba y eliminar el polvo, los pelos y cualquier otra suciedad adherida. El bicarbonato ayudará a desinfectar, mientras que el jabón descompondrá la grasa y la suciedad.
4. Aclara y seca
Una vez que las cerdas estén limpias, aclara la escoba con agua limpia para eliminar cualquier residuo de jabón o bicarbonato. Después, deja que se seque al sol antes de volver a montarla y usarla. Es fundamental que las cerdas estén completamente secas antes de su uso.
Y para hacer que tu casa huela rico mientras barres, puedes echar en las cerdas de la escoba unas gotitas de suavizante o aceite esencial de lavanda. ¡Verás como huele de maravilla!
Si la escoba tiene moho o huele mal
Cada cierto tiempo inspecciona las cerdas de la escoba. Si están muy gastadas, considera reemplazarlas por otra escoba. Si tienen moho o mal olor, limpia la escoba en profundidad en un cubo con agua caliente, vinagre y limón.
El vinagre es un desinfectante natural y ayudará a eliminar bacterias y malos olores de la escoba. Por su parte, el zumo de limón potencia la mezcla y agrega ese aroma fresco que tanto que tanto nos gusta.
Si lo prefieres, también puedes desinfectar tu escoba agregando un poco de lejía al agua de limpieza. Sin embargo, asegúrate de enjuagar muy bien para evitar dañar las cerdas.
Si la escoba tiene moho o huele mal
Cada cierto tiempo inspecciona las cerdas de la escoba. Si están muy gastadas, considera reemplazarlas por otra escoba. Si tienen moho o mal olor, limpia la escoba en profundidad en un cubo con agua caliente, vinagre y limón.
El vinagre es un desinfectante natural y ayudará a eliminar bacterias y malos olores de la escoba. Por su parte, el zumo de limón potencia la mezcla y agrega ese aroma fresco que tanto que tanto nos gusta.
Si lo prefieres, también puedes desinfectar tu escoba agregando un poco de lejía al agua de limpieza. Sin embargo, asegúrate de enjuagar muy bien para evitar dañar las cerdas.
Consejos adicionales para mantener la escoba en buen estado
- Limpia y desinfecta tu escoba al menos una vez a la semana. De esta manera, te aseguras de que la escoba esté siempre lista para ser utilizada sin redistribuir suciedad por tu hogar.
- Guarda la escoba en un lugar limpio y seco, preferiblemente bien ventilado y colgado. Esto evita que las cerdas se deformen con el paso del tiempo.
- Y no olvides sacudir y limpiar el cabezal de la escoba después de cada uso. Así reduces la probabilidad de que el polvo y los gérmenes se acumulen rápidamente en la escoba.
- Si tienes escobas de goma, puedes utilizar un cepillo más duro para eliminar la suciedad.
- Si la escoba es de cerdas naturales, límpiala solamente con agua caliente y jabón pH neutro.
- Para una limpieza completa, no olvides limpiar el recogedor y el mango de la escoba. ¡Es más fácil todavía!
- Por último, te recomiendo que tengas al menos dos escobas en casa, una para las superficies delicadas (como los suelos de madera natural) y otra para las superficies duras (suelos de piedra, baldosa, etc.).
Así de fácil es mantener la escoba limpia y desinfectada. Recuerda, es una tarea crucial para limpiar tu casa de manera rápida y eficiente, pero sobre todo para evitar arrastrar la suciedad de una estancia a otra.