¿Sabes para qué sirve la parte dentada de tus tijeras de cocina?
Secreto práctico
Descubre todos los usos prácticos que tiene y cómo aprovecharlos a diario

Las tijeras de cocina, también conocidas como tijeras de chef, se han convertido en un utensilio imprescindible en cualquier hogar. Aunque su función principal es cortar con precisión alimentos y envoltorios, muchas incorporan detalles que a menudo pasan desapercibidos.
Uno de ellos es la parte dentada que se encuentra en la zona de unión de las hojas. ¿Te has preguntado alguna vez para qué sirve o por qué está ahí? Aunque pueda parecer un adorno o una simple irregularidad en el diseño, lo cierto es que tiene varios usos prácticos en el día a día.
Más que un corte preciso
Originalmente, estas tijeras no fueron diseñadas para su uso en la cocina. Sin embargo, con el tiempo se han adaptado y hoy en día es muy común encontrarlas entre los utensilios de cocina.
El diseño con la parte dentada en la zona de unión de las hojas proviene de la jardinería, donde se utilizaba para retirar espinas de plantas como las rosas, cortar el exceso de hojas o eliminar aquellas secas o muertas.
Con el paso del tiempo, este tipo de tijeras se ha popularizado en entornos culinarios gracias a su versatilidad. La parte dentada, que se encuentra justo donde se cruzan ambas hojas, forma al cerrarse una superficie semicircular con pequeños dientes. Aunque en un primer vistazo pueda parecer decorativa, en realidad tiene múltiples funciones que pueden facilitar diversas tareas en la cocina.
Diseñadas para cortar alimentos duros
Una de las funciones principales de la parte dentada es facilitar el corte de elementos duros, como pequeñas piezas óseas o cáscaras resistentes. Es especialmente útil al tratar alimentos como mariscos o carnes con hueso. Por ejemplo, sirve para romper pinzas de cangrejo o langosta, cuya cubierta puede ser dura, resbaladiza y difícil de manipular con cuchillos comunes.
También se utiliza para cortar huesos pequeños, como los del pollo o conejo. Gracias a su diseño dentado, esta parte ayuda a mantener el hueso en su sitio mientras aplicas fuerza, evitando que se deslice y permitiendo un corte más seguro y controlado.

Aflojar tapas de botes y botellas
Otro uso muy práctico de esta zona dentada es el de aflojar tapas de botes o botellas pequeñas. A veces, abrir un frasco puede ser complicado, sobre todo si está muy apretado o tienes las manos húmedas.
La forma semicircular con dientes permite sujetar con firmeza la tapa, ejercer presión y girar para abrirla sin necesidad de herramientas adicionales. Solo tienes que colocar la tapa en la parte dentada, apretar suavemente y girar. Esta función resulta especialmente útil en cocinas con personas mayores o con problemas de fuerza en las manos.
Abrir nueces y otros frutos secos
La parte dentada también puede funcionar como cascanueces improvisado. Su forma circular permite sujetar frutos secos como nueces, almendras o avellanas, y al ejercer presión con las hojas, es posible romper la cáscara sin dañar el contenido interior.
Este uso se asemeja al de una pequeña prensa: solo necesitas colocar el fruto seco en la parte dentada, presionar con cuidado y conseguirás abrirlo de forma eficaz. Es una función especialmente útil si no tienes un cascanueces tradicional en casa.

Separar tallos de verduras
Una aplicación menos conocida, pero muy eficaz, es la de separar tallos o deshojar verduras. Si estás limpiando acelgas, espinacas, perejil o incluso ramas de apio, puedes pasar el tallo por la zona dentada de las tijeras para retirar las hojas rápidamente. Esto permite ganar tiempo en la preparación de ciertas recetas, evitando que tengas que hacerlo manualmente hoja por hoja.
Además, esta función también puede ayudarte a pelar hierbas aromáticas, como el tomillo o el romero, sujetando el tallo y deslizándolo hacia abajo para desprender las hojas sin dañarlas.