Descubre la parra virgen, la trepadora que mejor se adhiere a superficies lisas

Descubre la magia de la parra virgen o Parthenocissus tricuspidata, un arbusto trepador que se adhiere de forma espectacular a las superficies. Este otoño déjate cautivar por su encanto y sus hojas caducifolias de tonalidad rojiza. ¡Descubre con nosotros su belleza en constante transformación!
Descripción de la parra virgen
- Nombre común: parra virgen, Hiedra japonesa, Hiedra de Boton, parra de Virginia, Viña virgen
- Nombre científico: Parthenocissus tricuspidata
- Familia: VitaceaeOrigen: este de Asia: Japón, Corea, y el sur y este de China
- Ubicación: Exterior
- Luz: media sombra-sol directo
- Temperatura: amplio rango de temperaturas
- Riego: regular
Características de la parra virgen o Parthenocissus tricuspidata
El Parthenocissus tricuspidata, conocido como parra virgen, Hiedra japonesa o Hiedra de Bostón entre otros nombres, es un arbusto trepador de la familia Vitaceae oriundo del este de Asia (Japón, Corea y China). En nuestro país forma parte del las dicotiledóneas alóctonas y se ha encontrado subespontánea en el País Vasco y Valencia, según informan en Flora Ibérica.
Es una trepadora caducifolia muy rústica que puede llegar a alcanzar varios metros de altura. Es muy apreciada por su follaje cambiante en primavera y otoño. Inicialmente sus hojas son de un verde intenso muy bonito pero, a medida que se va acercando la época otoñal, van tornándose de un marrón rojizo muy decorativo. Eso sí, con el paso del tiempo, acabarán cayéndose.

La tonalidades de las hojas del Parthenocissus tricuspidata varían según la estación
Desarrolla unas flores a principios de verano de una tonalidad verde amarillenta, pero no son especialmente ornamentales. El fruto aparece en otoño y es una baya de color azul oscuro no comestible.
Parra virgen: las dos especies más comunes
Además del Parthenocissus tricuspidata, hay otra especie muy conocida como parra virgen: es el Parthenocissus quinquefolia. ¿Cómo diferenciarlas? Muy sencillo, el primero tiene tres foliólos y el segundo 5. Pero, no solo puedes distinguirlas por sus hojas, también puedes hacerlo por su forma de adherirse a las superficies.

De izq. a drch: Parthenocissus tricuspidata (3 folíolos) y Parthenocissus quinquefolia (5 folíolos)
El Parthenocissus quinquefolia tiene unos zarcillos de crecimiento en espiral que se adhieren sobre las estructuras, permitiendo a la planta ir trepando, guiarse y soportarse sobre ellas. Esta especie necesita de ramaje para poder trepar.
El Parthenocissus tricuspidata, por su parte, tiene unas ventosas (son unos pequeños puntos rojos) en la punta de sus zarcillos. Si arrancáramos unas ramas de una superficie, estas ventosas sacarían un poco de cal. Esta característica es la que le convierte en la planta trepadora que mejor se adhiere a superficies lisas (como puede ser de hormigón) sin dañarlas. Esto explica por qué su uso está tan extendido.

De izq. a drch: zarcillos de la parra virgen y la cal de sus ventosas
¿Cómo diferenciar la parra virgen y la hiedra?
Suele ser habitual que ciertas personas confundan a la parra virgen o Hiedra japonesa con la Hiedra o Hedera helix. Sus nombres ya anuncian similitudes, pero hay ciertos aspectos en lo que nos podemos fijar para diferenciar que se trata de una o de otra.
El primero de ellos es la duración de sus hojas. Mientras que la hiedra es una planta trepadora perenne, no pierde sus hojas, la hiedra japonesa es caducifolia, sus hojas adquieren una tonalidad rojiza en otoño y, después, se caen.

De izq. a drch.: hiedra y parra virgen, dos plantas para decorar fachadas
El segundo de ellos es su forma de crecer. A diferencia del Parthenocissus tricuspidata, que es capaz de trepar solo por una fachada, la hiedra necesita ayuda.
El poder ornamental de nuestra protagonista es tan impresionante que se cultiva alrededor de todo el mundo. Se usa principalmente para cubrir paredes, suelos y distintas superficies.
Cómo plantar la parra virgen para cubrir una superficie
Si quieres cubrir una fachada o una superficie vertical con una planta, esta planta trepadora es una gran opción. Te mostramos el paso a paso para hacerlo utilizando, para ello, la parte trasera de una barbacoa con fregadero que realizaron nuestros compañeros de Bricomanía.
Antes de comenzar con la plantación, debemos preparar el terreno sobre el que vamos a trabajar. Plantaremos sobre él nuestra protagonista de hoy, el Parthenocissus tricuspidata, y arbustos de hoja persistente.

Remover la tierra y añadir sustrato de plantación
En primer lugar, retiramos la capa de césped que podemos utilizar de nuevo ya que se trata de tepes. Si tuvieses calvas en el jardín, podrías utilizarlo sin problema. Volteamos y ahuecamos toda la tierra con una pala y comenzamos con el proceso de plantación.
Hacemos un hoyo en la tierra y aportamos una buena capa de sustrato de plantación. Esto ayudará a que el arraigo de la planta sea mucho mejor..
Sacamos el cepellón del contenedor en el que se encuentra y lo plantamos en la tierra. Añadimos un poco más de sustrato de plantación en la superficie y mezclamos todo de forma homogénea. Repetimos el proceso con otra variedad de parra virgen en el otro lateral. Con el paso del tiempo, las plantas irán trepando por la superficie lisa de la barbacoa.

Plantación de las parras vírgenes y el laurel
Entre las dos parras vírgenes plantamos un laurel para disimular la parte trasera de la barbacoa. Realizamos el hoyo de plantación, lo plantamos y regamos para que se asiente. Esta especie aportará un volumen de hoja persistente precioso.
Cultivo de la parra virgen
La parra virgen es una planta todoterreno que crece de forma espectacular casi en cualquier circunstancia, razón por la que es una trepadoras más queridas y utilizadas en jardinería ornamental para cubrir paredes y muros.
Ubicación y temperatura
Es una trepadora rústica, capaz de soportar tanto temperaturas altas como bajas (mínimo -15º C). Se desarrolla de forma estupenda en ambientes con una alta humedad y frescos por lo que, si vives en el norte de España, podría ser una estupenda opción.
Puede plantarse tanto en zonas soleadas como de semisombra, pero la cantidad de luz que reciba influirá considerablemente en la intensidad de la variación de su coloración.
Suelo

Hiedra de Boston sobre la fachada de un edificio
Esa rusticidad que le caracteriza también se debe a su adaptabilidad a los suelos aunque, tal y como explican desde Jardibotanic, tiene una preferencia por aquellos drenados y con abundante materia orgánica.
Poda
El ritmo de crecimiento de esta planta sobre una superficie es realmente rápido, llegando a superar los 15 metros en poco tiempo. Es por eso que es recomendable hacer podas puntuales para controlar su expansión.
Por el momento no forma parte del Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras pero sí del Atlas de las plantas Alóctonas Invasoras en España.