Cómo cultivar zarzamora en casa: guía fácil y con trucos útiles
Consejos prácticos
Aprende a cultivar zarzamora en tu jardín: fácil, deliciosa y perfecta para atraer aves y recuerdos del campo

La zarzamora es una de esas plantas que nos transporta directamente a la infancia: un paseo por el campo, unas moras maduras al borde del camino y los dedos manchados después de una buena recolección improvisada.
Pero más allá de recuerdos bonitos, es una planta fácil de cultivar, perfecta para jardines y huertos. En esta guía te explicamos todo lo que necesitas saber para cultivarla tú mismo en casa.
Ficha de la Zarzamora
- Nombre común: Zarzamora, mora, mora negra.
- Nombre científico: Rubus ulmifolius (la especie más común en España).
- Familia: Rosaceae.
- Origen: Europa (principalmente), Asia y América del Norte.
- Ubicación: Exterior.
- Luz: Semisombra
- Temperatura: Ideal entre 18º-30ºC.
- Riego: Moderado
Características generales
La zarzamora tiene el nombre científico de Rubus fruticosus y pertenece a la familia de las Rosáceas o Rosaceae, al igual que la fresa y la frambuesa.

Su origen es incierto, ya que diferentes variedades crecen en Norteamérica, Europa y Asia. En algunos países se considera una maleza, mientras que en otros se han desarrollado variedades mejoradas, incluso sin espinas, para facilitar su cultivo y aumentar la producción.
En España, la zarzamora más habitual suele ser la especie Rubus ulmifolius. Esta planta trepadora silvestre es un manjar para pájaros y jardineros por igual.
Crece con facilidad, se adapta muy bien a los terrenos. Este tipo de plantas están compuestas por una gran cantidad de pinchos (son verdaderos zarzales) y, además, nos indican el grado de humedad del terreno en el que están, lo cual es muy útil si tienes un huerto o jardín.
Es tan vigorosa que puede llegar a cubrir árboles enteros. Por ejemplo, en el caso del ejemplar del vídeo que acompaña este texto, ya está a medio tronco de un árbol de chopo. Así que, si le das vía libre, crecerá sin ningún tipo de problema.
A comienzos de la primavera ya se empiezan a ver sus pequeñas flores blancas, que siempre aparecen en la punta de las ramas. Estas flores anuncian que nuestras moras ya están creciendo, solo es cuestión de tiempo para que maduren.
Su flor recuerda mucho a la de las fresas, ya que ambas especies pertenecen a la misma familia. Y como en todos los frutales, al perder la flor, se queda una pequeña bolita que será el fruto.
Aunque muchos piensan que la zarzamora es una baya, en realidad es una polidrupa: cada bolita del fruto es una pequeña drupa con su semilla. Toda la fruta está formada por esta agrupación de pequeñas drupas.

Además, estas drupas maduras son un manjar para muchos pájaros del jardín, que ayudan a dispersar sus semillas mientras disfrutan del fruto.
Con el paso del tiempo, esta bolita se irá transformando: primero será verde, luego rojiza y, por último, se pondrá completamente negra. En ese momento ya se puede comer. Es un fruto comestible, dulce y muy popular.
En España, la zarzamora se recolecta en verano, generalmente desde finales de junio hasta agosto o septiembre, dependiendo de la zona y el clima local.
Seguro que cuando eras pequeño y pasabas tiempo en el pueblo, alguna que otra zarzamora caía en tus paseos. Es una delicia para comerla por si sola o para hacer mermeladas o postres.
Zarzamora vs mora: ¿es lo mismo?
Antes de contarte cómo cultivar esta especie en tu jardín, queremos dar nuestra atención a algo que suele generar mucha confusión: ¿zarzamora y mora se refieren a lo mismo?
La respuesta es simple: no, pero esta confusión tiene su sentido. Y es que la palabra “mora” puede referirse a muchas cosas.

La zarzamora es una planta trepadora silvestre, y su fruto comestible se conoce popularmente como “mora”. Pero, la palabra “mora” también se usa para referirse a otros frutos, como los de la morera (Morus nigra o Morus alba), un árbol que no tiene ninguna relación botánica con la zarzamora.
Cómo cultivar zarzamora en casa paso a paso
¿Pensando en cultivar una zarzamora en el jardín? Es una planta muy rústica pero, como toda planta que crece con fuerza, necesita ciertos cuidados para que no se convierta en un zarzal sin control.
Luz y temperatura
La zarzamora prefiere zonas de sombra. Aunque aguanta algo de sol, si puedes colocarla en una zona sombreada o de semisombra, mejor. En la sombra hay más humedad y eso le encanta.
En cuanto a temperatura, lo ideal es que esté entre 18 ºC y 30 ºC. Tolera heladas suaves, así que es bastante resistente al frío si no es extremo.
Riego y humedad ambiental
El riego debe ser moderado. Es importante mantener el suelo húmedo, pero sin encharcar, ya que el exceso de agua podría afectar sus raíces. El sistema más adecuado es el riego por goteo.
La zarzamora es buena para detectar si el terreno tiene buena humedad por lo que si encuentra un entorno adecuado, lo verás en el aspecto sano de sus hojas y en su crecimiento constante.

Suelo y abono
La mora no es excesivamente exigente con el tipo de suelo, aunque este tipo de plantas agradece un suelo rico en materia orgánica, suelto y con buena retención de humedad. Prefiere un pH del suelo entre 5,2 y 6,7.
La zarzamora necesita fertilizarse cada cuatro meses, sobre todo con nitrógeno, para crecer bien. También es bueno añadir estiércol cada 2 o 3 años para mantener la tierra saludable.
Poda
La poda es imprescindible si no quieres que se descontrole. La zarzamora puede cubrir árboles enteros si la dejas a su aire.
Lo ideal es podarla al final del invierno. Quita las ramas viejas o secas y deja espacio para que las nuevas crezcan con fuerza.
Guiado
Una de las claves para tener éxito con la zarzamora es guiarla desde el principio. Usa alambres, muros o vallas para ir llevándola por donde tú quieras.
Guíala con paciencia y, en el futuro, además de regalarte sus deliciosos frutos, se convertirá en un elemento decorativo que aporta verdor y frescura al jardín.
Plagas y enfermedades
Aunque es una planta bastante fuerte, también puede tener algún que otro visitante indeseado si las condiciones no son las adecuadas. Las más comunes son los pulgones, la araña roja y el moho gris.
Como siempre decimos, la mejor defensa siempre será una buena prevención: buena circulación del aire y revisiones periódicas.
Referencias:
"Orientaciones para el cultivo de la Zarzamora”, publicado por GDR Oriente de Asturias, disponible en leaderoriente.es. Guía práctica que aborda el entutorado, exigencias de suelo y clima, riego, fertilización, poda, plagas y enfermedades en el cultivo de zarzamora