La poda del almendro: técnica clave para la productividad y salud del árbol

¿Te gustaría cultivar tus propias almendras? Descubre cómo podar tu almendro de forma correcta para obtener una cosecha abundante. Aprende los secretos de la poda y transforma tu jardín en un paraíso lleno de flores y frutos deliciosos.
El almendro es un árbol que produce unas preciosas flores invernales y unos frutos muy apreciados por su sabor y beneficios: las almendras. ¿Te imaginas poder cosechar estas maravillas en tu propio jardín?
Si vives en un clima cálido y quieres animarte a cultivar un almendro, una de las claves para su correcta fructificación es aprender a podarlo correctamente, equilibrando la parte vegetativa y la productiva. Si se realiza una poda excesiva, el árbol podría concentrarse más en producir madera que en florecer.
La poda del almendro o Prunus dulcis, como se le conoce científicamente, es bastante similar a la poda del ciruelo, el durazno o el melocotonero (aunque con sus pequeños matices). Si ya tienes experiencia con alguno de estos, ¡te será mucho más fácil!
En este artículo, te explicamos los aspectos más importantes para llevar a cabo una poda exitosa del almendro. Tal y como menciona el Manual del Almendro (Junta de Andalucía, 2013), estas técnicas no solo son esenciales para asegurar una producción eficiente, sino también para mantener el árbol en buen estado a lo largo del tiempo.
¿Para qué sirve la poda del almendro?
La poda del almendro es una práctica esencial para el correcto mantenimiento del árbol, tanto en su forma como en la producción de frutos.

Consiste en eliminar aquellas ramas que no contribuyen al desarrollo del árbol, mejorando la ventilación y reduciendo, por ende, el riesgo de enfermedades. Una poda bien realizada también mejora la fotosíntesis, lo que permite que el árbol produzca más almendras.
Tal y como menciona David Olmo Nadal en el informe El almendro: árbol hermoso y más aún en agricultura ecológica, el almendro es una especie que necesita mucha luz. Por eso, es importante abrir la copa del árbol para facilitar la aireación y la entrada del sol al interior, pero sin excedernos, ya que esto podría causar quemaduras en la corteza.
¿Qué es el sistema de formación del almendro?
El sistema de formación del almendro se refiere a cómo estructuramos el árbol para que crezca de manera correcta y, de esta forma, sea más y productivo.
Una correcta formación ayuda a evitar la competencia por luz y aire, asegurando que el árbol se desarrolle fuerte y con una buena carga de frutos.
El Vaso de Pisos: El sistema de formación más común
El sistema más utilizado para la formación del almendro es el vaso de pisos. Este método organiza las ramas del árbol en diferentes niveles o "pisos", de ahí su nombre, permitiendo que el árbol crezca de forma ordenada y con suficiente espacio entre las ramas.

En la poda del almendro, es fundamental elegir las ramas adecuadas. Las ramas primarias deben tener un ángulo de aproximadamente 45º respecto al tronco, para que crezcan de forma sólida.
Tipos de poda del almendro
Existen diferentes tipos de poda del almendro, cada uno adaptado a la etapa de desarrollo del árbol. Según el Manual del Almendro (Junta de Andalucía, 2013), cada tipo de poda tiene un objetivo específico y debe realizarse en el momento adecuado para no dañar al árbol.
Poda de plantación
La poda del almendro comienza desde el principio con la poda de plantación y prepara al árbol para su desarrollo futuro. Simplemente se eliminan las raíces dañadas y se despuntan las ramas principales para establecer una buena base de crecimiento.
Poda de formación
La poda de formación de los árboles frutales se realiza durante los primeros años, generalmente hasta los 7 años. El objetivo principal es dar al árbol la forma deseada y asegurar que sus ramas se desarrollen correctamente.
Para ello, también se eliminan aquellas que no siguen la estructura que se quiere o que están crecimiento de forma desordenada. Este proceso generalmente se hace a principios de primavera.
Poda de producción
Una vez que el almendro empieza a producir frutos, se realiza la poda de producción. En esta etapa, se trata de mantener la estructura del árbol y eliminar las ramas viejas o menos productivas. El objetivo es maximizar la cosecha sin comprometer la salud del árbol.

Esto debe hacerse después de la cosecha, en invierno, cuando el árbol se encuentra en su periodo de descanso vegetativo.
Poda de rejuvenecimiento
Con el paso de los años, algunas ramas del almendro pueden perder su capacidad de producción.
La poda de rejuvenecimiento consiste en cortar las más viejas y ayudar a que el árbol recupere su productividad. Este tipo de poda es fundamental para mantener la producción a largo plazo y suele llevarse a cabo después de la cosecha, en invierno.
En grandes plantaciones, también se realiza la poda mecánica por su eficiencia al reducir costos y tiempo. Sin embargo, en un cultivo más pequeño, como puede ser el tuyo, no es necesario. Además, la poda manual siempre será esencial para mantener la estructura del árbol de forma correcta.
Esperamos que esta pequeña guía te haya ayudado a podar correctamente tu almendro, y que logres obtener sus ansiadas almendras. Este frutal no solo es una fuente de frutos deliciosos, sino también un árbol ornamental impresionante.
Ya sea por su belleza o por sus frutos, ¡el almendro es un indispensable en cualquier jardín!
Olmo Nadal, D. (2008). El almendro: árbol hermoso y más aún en agricultura ecológica. Recuperado de: Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA): https://www.mapa.gob.es/ministerio/pags/Biblioteca/Revistas/pdf_Ferti%2FFerti_2008_33_58_62.pdf
Junta de Andalucía. (2013). Manual del almendro. Recuperado de: https://www.juntadeandalucia.es/organismos/agriculturaypesca/areas/fruticultura/Paginas/almendro.aspx