El verano es una buena época para darle un lavado de cara a la casa: tenemos más horas de sol, más tiempo y normalmente nos sentimos mucho más activos para hacer diferentes trabajos.
Por eso, a continuación te enseñamos unos sencillos tutoriales de bricolaje con los que podrás cambiar por completo tu casa. ¡Y lo mejor de todo es que no tendrás que hacer grandes obras!
Cambiar el aspecto de los azulejos
Hoy en día existen diferentes formas de cambiar el aspecto de los azulejos de la cocina o incluso del baño, y sin hacer obras.
Por ejemplo, puedes optar por revestir la pared empleando unas piezas que imitan el azulejo: se trata de un material fácil de manipular, que resiste la humedad y las altas temperaturas.
Otra opción es pintar las baldosas con un esmalte para superficies cerámicas. De esta manera, no hará falta hacer obras para quitarlas o sustituirlas por otras.
Además, hay una amplia gama de colores con los que podremos pintar las baldosas o azulejos y así lograr na estancia completamente diferente.
Lacar o pintar las puertas
Si lo que buscas es cambiar el aspecto de las puertas porque están deterioradas o pasadas de moda, nada mejor con lacar las puertas con un nuevo color o acabado.
A la hora de darles un ascpecto completamente nuevo a las puertas, podemos hacerlo utilizando rodillos y brochas.
Bastará con lijar la superficie, aplicar una capa de imprimación o selladora y luego pintarlas con el color que hayamos elegido.
Otra opción más rápida para hacer este trabajo y que da un aspecto más homogéneo y profesional es utilizando una pistola.
Las pistolas o turbinas de pintura son muy útiles para este tipo de trabajo, pero como hemos comentado anteriormente, con rodillo o brocha también se puede hacer sin problemas.
Colocar un suelo nuevo sin hacer obras
Para renovar el suelo sin necesidad de obra, hoy en día podemos optar por diferentes opciones: madera, suelos vinílicos, moquetas...
Tanto los suelos de tarima flotante, que se colocan con un sistema de clics, como los vinílicos, que va pegados con adhesivo, se colocan fácilmente y suelen resultar bastante económicos.
Dar una capa de pintura a los armarios
Si en vez de cambiar los armarios de la cocina les damos una capa de pintura, no sólo conseguiremos esa sensación de nuevo, si no que nos ahorraremos una buena cantidad de dinero.
Puede parecer complicado pintar los muebles de la cocina, pero es más fácil de lo que crees.
Puedes optar por lacas de alto brillo o si prefieres algo más sencillo puedes optar por vinilos decorativos.
Alisar una pared con gotelé
El gotelé ha pasado ya a la historia pero todavía se puede encontrar en muchas casas, debido a que hasta ahora solía ser siempre un trabajo bastante costoso.
Pero si te quieres olvidar para siempre del gotelé y tener las paredes lisas, no hace falta meterte en grandes obras. ¡Te enseñamos paso a paso a alisar paredes!
Basta con utilizar una masilla o pasta especial para ello, cubirir la pared, alisarla y volver a pintar. ¡Así de sencillo!