Las chuletillas de cordero son siempre una delicia pero si además las envolvemos en una suave bechamel, las rebozamos y las freímos se convierten en un capricho irresistible. Perfectas para servir en cualquier ocasión especial como entrante para compartir o como plato principal acompañadas de ensalada.
En esta receta Karlos Arguiñano nos enseña cómo hacer unas sabrosas chuletillas a la Villeroy, una preparación que debe su nombre a François de Neufville, segundo duque de Villeroy, cuyo cocinero inventó esta salsa derivada de la bechamel.
¿Qué es la Villeroy?
Villeroy o Villeroi es una salsa derivada de la bechamel, pero ¿en qué se diferencian? Mientras la bechamel tradicional se elabora solo con harina, leche y mantequilla la Villeroy añade a esa bechamel queso rallado y huevo para obtener una textura más espesa, y originalmente incorporaba extracto de trufa o champiñón. Una salsa utilizada tradicionalmente para envolver alimentos para después rebozar y freír, como pollo, pavo, cerdo o chuletillas de cordero como en esta receta.
Ingredientes (4 personas):
- 20 chuletitas de cordero
- 1/2 l de leche
- 40 g de harina
- harina, huevo batido y pan rallado (para rebozar)
- 2 cogollos de Tudela
- 25 g de mantequilla
- aceite de oliva virgen extra
- vinagre
- sal
- perejil

Elaboración de la receta de chuletillas de cordero por Karlos Arguiñano:
Limpia las chuletitas retirándoles la carne que tengan pegada al hueso (puedes reservar los recortes retirados para hacer un arroz o bien para freírlos con unos dientes de ajo laminados).
Unta una bandeja de horno con un poco de mantequilla, sazona las chuletillas y extiéndelas en la bandeja. Hornéalas a 200º durante 5 minutos. Retíralas y deja que se enfríen.

Para preparar la bechamel, pon a calentar un chorrito de aceite en una cazuela. Agrega la harina y rehógala un poco. Añade la leche poco a poco sin dejar de remover. Sazona y cocina la bechamel durante 6-8 minutos. Agrega un poco de perejil picado y mezcla bien.
* Truco: Para hacer la auténtica Villeroy y conseguir una textura más espesa añade queso o huevo.

Introduce las chuletillas (agarrándolas por el hueso) en la bechamel hasta que queden bien impregnadas. Colócalas sobre una fuente (untada con mantequilla) y deja que se enfríen.

Pásalas por harina, huevo batido y pan rallado, y fríelas en una sartén con aceite caliente. Escúrrelas sobre un plato cubierto con papel absorbente de cocina.

Deshoja los cogollos y córtalos en juliana fina. Alíñalos con aceite, vinagre y sal. Sirve en cada plato 5 chuletitas y un poco de ensalada. Decora los platos con unas hojas de perejil.

Consejos:
Podéis utilizar aceite en vez de mantequilla (tanto para untar la bandeja del horno como para untar la fuente), pero la mantequilla le dará un toque francés muy diferente.
