Revuelto de pimientos y langostinos: una receta ligera de Arguiñano

Un revuelto es un plato sencillo y versátil que, al igual que las tortillas, se presta a innumerables combinaciones de ingredientes.
Karlos Arguiñano propone esta versión de revuelto con pimientos y langostinos, una receta fácil, sabrosa y perfecta para aprovechar las hortalizas que tengas en la nevera. 'Un plato sencillo, delicioso y muy apañado', comenta Arguiñano.
Raciones
4
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
15 m
Cocinado
50 m
Tiempo total
1 h 5 m
Ingredientes (4 personas):
- 8 huevos
- 12 langostinos
- 2 pimientos rojos
- 1 cebolleta
- 10 ajos frescos
- 1 diente de ajo
- 8 rebanadas de pan
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Perejil
Elaboración de la receta revuelto de pimientos y langostinos paso a paso
1. Asa los pimientos en el horno
Corta los pimientos por la mitad a lo largo y retírales el tallo y las semillas. Coloca los pimientos (dejando la parte de la piel hacia arriba) en una bandeja de horno, riégalos con un poco de aceite (1-2 cucharadas) y sazónalos.
Introdúcelos en el horno (previamente calentado) y hornéalos a 180 ºC durante 35-40 minutos. Retíralos, deja que se templen, pélalos, córtalos en tiras (2 cm x 3 cm.) y resérvalos.

2. Tuesta el pan en el horno
Pon las rebanadas de pan en otra bandeja de horno, Introdúcelas en el horno y hornéalas hasta que se tuesten. (4-5 minutos aprox.) Retíralas y resérvalas.

3. Saltea las hortalizas con los langostinos
Retira las cabezas de los langostinos. Pela las colas y resérvalas.
Calienta una sartén con 3 cucharadas de aceite. Corta la cebolleta en juliana fina, introdúcela en la sartén y rehógala a fuego suave durante 5 minutos.
Limpia los ajos frescos (retirándoles la parte inferior, la superior y 2 capas de hojas), córtalos en trozos de 2 cm e introdúcelos en la sartén. Sazona y rehoga las hortalizas a fuego suave durante 4-5 minutos.
Corta los langostinos en trozos de 2 cm, sazónalos, añádelos a la sartén y saltéalos brevemente. Incorpora las tiras de pimiento y rehoga todo junto durante un par de minutos.

4. Cocina el revuelto de pimientos y langostinos
Bate los huevos en un bol y sazónalos. Agrega la farsa de cebolla, ajos frescos, pimientos y langostinos, espolvoréala con un poco de perejil picado, y mezcla bien.
Calienta una sartén grande con 1 cucharada de aceite. Agrega la mezcla de huevos, cebolleta, ajos, langostinos, pimientos y perejil, y cocínala (sin dejar de remover) a fuego suave hasta que consigas el punto deseado (los huevos no tienen que quedar completamente cuajados).

5. Sirve el revuelto de pimientos y langostinos
Unta las rebanadas de pan con el diente de ajo.
Reparte el revuelto en 4 platos, acompáñalos con las rebanadas de pan tostado y decóralos con unas hojas de perejil.

Consejos de Karlos Arguiñano para hacer revuelto de pimientos y langostinos
Según la Real Academia Española, un revuelto es un 'plato consistente en una mezcla de huevos y algún otro ingrediente, que se cuaja sin darle forma alguna'.
Una de sus principales ventajas es que admite una gran variedad de ingredientes, por lo que es perfecto para aprovechar las verduras que han quedado en la nevera. La clave para lograr un buen revuelto es que quede jugoso, pero sin exceso de líquido y nunca seco.
Cómo cuajar el revuelto
Arguiñano sugiere cuajarlo en una sartén antiadherente, aunque también puede hacerse al baño maría en un bol, aunque este método requerirá más tiempo.
Es importante calentar bien la sartén con la grasa elegida (aceite o mantequilla) antes de verter la mezcla de huevos. Luego, hay que remover constantemente con una cuchara de madera.
Cuando los huevos comiencen a cuajarse, baja la temperatura al mínimo y sigue removiendo con movimientos circulares y suaves. Cuando el revuelto esté justo cuajado y no quede líquido en el fondo, retíralo de inmediato a un plato frío y sírvelo al momento.
Cómo conservar el revuelto de pimientos y langostinos
Este plato se disfruta mejor recién hecho, ya que su textura cremosa y jugosa se pierde con el tiempo. Sin embargo, si necesitas conservarlo, guárdalo en la nevera por un máximo de 24 horas en un recipiente hermético, una vez que se haya enfriado completamente.
Es importante recordar que, al refrigerarlo, los huevos seguirán cocinándose ligeramente por el calor residual y perderán parte de su textura original.
Para recalentarlo, hazlo a fuego bajo con unas gotas de aceite de oliva, removiendo suavemente para recuperar algo de su cremosidad. No se recomienda congelarlo, ya que los huevos cambiarían drásticamente de textura y los langostinos se volverían gomosos.
Con qué acompañar el revuelto de pimientos y langostinos
Este revuelto puede servirse de distintas formas según la ocasión. Como tapa o entrante, queda perfecto sobre rebanadas de pan casero ligeramente tostado, como propone Karlos Arguiñano.
Para una presentación más sofisticada, puede servirse dentro de tartaletas pequeñas de hojaldre. Y si se sirve como plato principal en la cena, combina muy bien con una ensalada de aguacate, tomate y lechuga.