¿Cómo cultivar garbanzos? Guía completa para tu huerto

Descubre cómo cultivar tus propios garbanzos de manera fácil y aprovechar sus increíbles beneficios para el suelo. Aprende todo sobre esta legumbre milenaria, desde su historia hasta los cuidados que necesita para crecer fuerte y saludable. ¡Convierte tu huerto en un rincón sostenible y disfruta de tu propia cosecha!
¿Sabías que el garbanzo es una de las legumbres más antiguas cultivadas por el serhumano? Su historia se remonta a hace más de 10.000 años y ha sido un alimento esencial endiversas culturas a lo largo del tiempo.
Pero además de su importancia en la gastronomía, laplanta del garbanzo también puede ser un cultivo interesante para nuestro jardín o huerto y unaestupenda forma de enriquecer nuestros suelos.
En este artículo te contamos todo sobre esta planta, sus curiosidades y, por supuesto, los cuidados que necesita para que puedas cultivarla con éxito. ¿Te interesa?
¿Cómo es la planta del garbanzo?
El garbanzo (Cicer arietinum) es una planta herbácea anual perteneciente a la familia de las fabáceas, por lo que es uno de los ejemplos más claros de leguminosas. Se cree que surgió el Mediterráneo y que poco a poco se fue expandiendo por Asia, África y América, por lo que hoy en día es una especie completamente cosmopolita.
Se trata de una especie de crecimiento relativamente compacto, alcanzando normalmenteunas alturas de entre 30 y 60 centímetros.
A diferencia de otras plantas leguminosas, el garbanzo nodesarrolla tallos trepadores ni se comporta como una enredadera, sino que presenta un porteerguido y algo ramificado. Su estructura es muy resistente, gracias también a la profundidad quepueden alcanzar sus raíces cuando penetran en el suelo.

Por este motivo, no suele ser necesarioutilizar ningún soporte para su crecimiento, ya que suele crecer de manera erguida sin necesidadde tutorizarlo, algo que sí es necesario en otras muchas leguminosas.
Esto solo se recomienda sicultivamos esta especie en una zona con vientos fuertes. Sus hojas son compuestas, pinnadas,ligeramente dentadas y de pequeño tamaño, con un tono verde grisáceo que le da una aparienciadelicada.
Sus flores, generalmente blancas o violáceas, aparecen en las axilas de las hojas y danlugar a las vainas que contienen las semillas. Estas semillas son los garbanzos que consumimosy que nos van a recordar a otras vainas de leguminosas, como las lentejas o las judías, aunqueson de menor tamaño.
Cosecha y beneficios de los garbanzos para el suelo
Si abrimos una de estas vainas, veremos que en su interior encontramos unas semillas similares a los guisantes, pero de un menor tamaño y con arrugas. Su cosecha se realiza cuando las vainas se tornan secas y amarillentas, lo que suele ocurrir unos 3 o 4 meses después de la siembra.
No podemos consumir directamente estas semillas conforme las recolectemos, sino que es necesario dejar estas vainas unos días secándose al sol para que su apertura sea más fácil.
Una vez extraemos las semillas y las limpiamos bien tenemos que volver a secarlas al sol o ayudándonos de un secador artificial para que pierdan la mayor parte de su humedad y podamos conservarlas hasta que las rehumedezcamos para consumirlas.
Una de las curiosidades más interesantes de esta planta es que tiene una adaptación extraordinaria a climas secos gracias a sus raíces.
Además, estas estructuras son capaces de fijar nitrógeno en el suelo gracias a su relación simbiótica con bacterias del género Rhizobium, lo que la convierte en un cultivo beneficioso para mejorar la fertilidad del suelo. ¡Todo son ventajas! Si te interesa este tema, te hablamos más en detalle sobre qué es la simbiosis y su importancia en su artículo correspondiente.
Cuidados para cultivar garbanzos en el jardín
Ubicación
La planta del garbanzo es una planta adaptada tanto a climas cálidos como templados, por lo que se desarrolla mejor con temperaturas entre 15 y 30 °C. Aunque puede tolerar temperaturas más bajas, no soporta bien las heladas, por lo que se recomienda sembrarlo en primavera si vivimos en regiones con inviernos fríos.
Debe situarse en una zona con abundant luz solar, ya que requiere al menos 6 horas diarias de sol directo para crecer de manera correcta y que de esta manera se logre una producción abundante de semillas. Debido a su porte bajo y ramificado, no suele presentar problemas con el viento, aunque conviene protegerlo si hay corrientes fuertes.

No se trata de una planta con elevado valor ornamental, por lo que lo más común es que la cultivemos para poder disfrutar de consumir nuestros propios garbanzos. Por este motivo, te recomiendo que plantes directamente en el suelo, con lo que además estaremos enriqueciendode nitrógeno nuestro suelo para que posteriores cultivos lo aprovechen.
Riego
Tal y como comentábamos antes, la planta del garbanzo es una planta adaptada a climas secos, por lo que no requiere riegos constantes, lo que lo hace ideal para un cultivo más despreocupado. De hecho, es habitual que un exceso de humedad puede ser perjudicial, ya que no tolera los encharcamientos.
Por este motivo, te recomiendo que realices riegos moderados al inicio del cultivo para favorecer la germinación y el desarrollo de las plántulas, pero que una vez que la planta esté establecida únicamente la riegues una vez a la semana o cada dos semanas, siempre en función de las precipitaciones.
Existe una excepción a tener en cuenta, y es durante la floración y la formación de las vainas, ya que durante este periodo conviene mantener ligeramente un mayor nivel de humedad, siempre sin encharcar el suelo. Después, te recomendamos volver a reducir el riego antes de la cosecha, ya que esto favorece una mejor calidad de las semillas.
Suelo y fertilización
El garbanzo prefiere suelos sueltos, bien drenados y ligeramente arenosos. No es exigenteen cuanto a nutrientes gracias a esta relación simbiótica con bacterias del género Rhizobium,pero es cierto que se desarrolla mejor en suelos neutros o ligeramente ácidos o básicos, con unpH entre 6 y 8.

A pesar de esto, podemos optar por enriquecer el suelo con compost antes de lasiembra para mejorar su estructura, aunque no es necesario.Un aspecto importante a recordar es que el garbanzo no tolera los encharcamientos, porlo que es fundamental evitar suelos demasiado arcillosos o compactos, ya que estos nofacilitarán este drenaje.
Poda
A diferencia de árboles frutales o arbustos, de cuyas podas hemos hablado en otrosartículos, el garbanzo no requiere podas específicas, ya que después de producir las semillasmuere como muchas otras plantas anuales.
Sin embargo, sí que es conveniente eliminar hojas oramas secas para favorecer la aireación de la planta y reducir el riesgo de enfermedades, sobretodo las de origen fúngico.
Plagas y enfermedades.
Aunque es una planta resistente, el garbanzo puede verse afectado por algunas plagas y enfermedades. Entre las plagas más comunes encontramos el pulgón, la mosca del garbanzo
(Liriomyza cicerina) y ciertas orugas que pueden dañar las hojas y vainas al alimentarse de ellas.
Para controlarlas, podemos recurrir a insecticidas ecológicos de los que ya hemos hablado en otros artículos, como el aceite de neem, aunque también podemos optar por utilizar la biología a nuestro servicio e introducir depredadores naturales como las mariquitas.
También debemos estar atentos a enfermedades de origen fúngico como el mildiu. Como te comentábamos, la planta de garbanzos es muy sensible al exceso de humedad, así que para
prevenirlas es fundamental evitarlo y favorecer una buena ventilación entre las plantas.
Nuestras mejores herramientas para prevenir este tipo de enfermedades son un riego moderado y la rotación de cultivos con, por ejemplo, alguna especie que requiera suelos ricos en nitrógeno. Esto ayudará a mantener la salud del suelo, reducir la aparición de patógenos y beneficiarnos de la planta de garbanzo aún incluso cuando su ciclo de vida ha terminado.
Reproducción de la planta del garbanzo
El garbanzo se reproduce únicamente por semillas y su cultivo es bastante sencillo. Para sembrarlo podemos utilizar semillas que compremos como legumbres en el propio supermercado.
Para hacerlo basta con enterrar las semillas a 3 o 5 centímetros de profundidad en primavera (y también en otoño, si nuestros inviernos no son muy fríos) y su germinación ocurrirá entre 7 y 14 días después.

Como ves, cultivar garbanzos en casa no solo es una excelente manera de obtener unalegumbre nutritiva y deliciosa, sino que también es un cultivo muy sencillo y beneficioso para elsuelo.
Si tienes un huerto o un jardín con espacio suficiente, no esperes más para comenzar acultivar esta planta. ¡Es el momento de recordar cuando las cultivábamos en el colegio, entrealgodones, pero en nuestra propia tierra!