¿Cómo se alimentan los hongos?

¿Te has preguntado alguna vez cómo los hongos consiguen su alimento? En este artículo, te contamos todo sobre su sorprendente nutrición y su papel esencial en la naturaleza.
A menudo pensamos en los hongos como ingredientes en la cocina o pequeños organismos en los árboles, pero su nutrición es mucho más compleja.
¿Sabías que son fundamentales para el equilibrio de los ecosistemas? Además de descomponer materia orgánica, los hongos forman asociaciones simbióticas con otras especies.
En este artículo, te contamos cómo se alimentan los hongos y su importancia ecológica, basándonos en un informe detallado titulado El futuro del cultivo de los hongos superiores, elaborado por los expertos Juan Antonio Llorens, F. Javier Lladó y Montserrat Coll, y publicado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
¿Por qué los hongos no pueden fabricar su propio alimento?
Los hongos son unos organismos heterótrofos, es decir, son aquellos que no pueden producir su propio alimento a partir de la luz solar, como ocurre como la mayoría de las plantas.

¿Cómo lo consiguen entonces? En lugar de eso obtienen los nutrientes que necesitan de otras fuentes orgánicas, como pueden ser restos de plantas o animales. Esta característica los diferencia claramente de las plantas, que realizan la fotosíntesis para sintetizar su propio alimento.
Sin embargo, siempre existen excepciones en el reino vegetal, como las plantas albinas, que también carecen de clorofila y no pueden realizar fotosíntesis.
Formas principales en las que los hongos se alimentan
Después de entender que los hongos no fabrican su propio alimento, ¿qué formas existen de que los obtengan? Tal y como mencionan en el informe presentado sobre el cultivo de los hongos, existen en concreto tres:
Saprófitos: Los recicladores de la naturaleza
Los hongos saprófitos se alimentan de materia orgánica muerta, como restos de plantas y animales descompuestos, un proceso crucial para reciclar nutrientes en el ecosistema. Gracias a su capacidad para descomponer la materia orgánica, liberan nutrientes esenciales que otras plantas pueden utilizar para crecer.
Las setas, por ejemplo, serían un ejemplo típico ya que su función principal en el ecosistema es reciclar los nutrientes a partir de la descomposición de materia orgánica.
Parásitos: Los hongos que afectan a otros organismos
Los hongos parásitos se alimentan de organismos vivos como pueden ser las plantas. Estos hongos roban los nutrientes de la planta, lo que a menudo debilita o incluso mata al hospedador.
Aunque su nutrición suele ser demoledora, los hongos parásitos cumplen un rol importante en el control de poblaciones de plantas y en el equilibrio natural de los ecosistemas.
Este tipo de nutrición parásita también es compartido por algunas plantas parásitas. Al igual que los hongos, estas dependen de otras plantas para obtener agua y nutrientes.

Sin embargo, mientras que los hongos parásitos no tienen capacidad fotosintética y dependen completamente de sus huéspedes para su nutrición, las plantas parásita, son capaces de realizar parte de la fotosíntesis para producir algunos de sus propios nutrientes.
Simbióticos: Relación de beneficio mutuo
Los hongos simbióticos forman asociaciones beneficiosas con otros organismos, como las plantas, en una relación conocida como simbiosis.
Aunque hablaremos más sobre las micorrizas en un artículo futuro, es importante destacar que estas relaciones permiten que tanto el hongo como la planta se beneficien mutuamente.
En estas asociaciones simbióticas, el hongo ayuda a la planta a absorber nutrientes esenciales del suelo, como fósforo y nitrógeno, mientras que la planta proporciona compuestos orgánicos ricos en carbono al hongo.
¿Cómo impacta la nutrición de los hongos en los ecosistemas y la agricultura?
La nutrición de los hongos no solo tiene un impacto ecológico importante, sino que también es fundamental en la agricultura.
Los hongos, como los saprófitos, ayudan a descomponer la materia orgánica, lo que mejora la calidad del suelo. Además, los hongos simbióticos, al mejorar la absorción de nutrientes por parte de las plantas, pueden ser beneficiosos para los cultivos agrícolas.
Como has podido comprobar, los hongos son organismos increíblemente versátiles en su forma de alimentarse. ¿Lo sabías?
Llorens, J. A., Lladó, F. J., & Coll, M. (1984). El futuro del cultivo de los hongos superiores. Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Recuperado de https://www.mapa.gob.es/ministerio/pags/Biblioteca/Revistas/pdf_Hort%2FHort_1984_17_7_11.pdf