Descripción de la cheflera o Schefflera Arboricola
- Nombre común: Cheflera
- Nombre científico: Schefflera Arboricola
- Origen: sudeste de Asia
- Ubicación: rincón luminoso y espacioso
- Luz: muy luminoso, algo de sol directo
- Temperatura ideal: 16 - 21 ºC
- Temperatura mínima: 3 - 5 ºC
- Riego: pc. moderado; pd. dejar secar capa superficial entre riegos
- Fertilización: pc. cada 3 semanas, pd. cada 2 meses
Características de la cheflera o Schefflera Arboricola
La cheflera (Schefflera actinophylla) es una planta de interior originaria de Australia muy agradecida, fuerte y de gran desarrollo, que con unos mínimos cuidados puede llegar a alcanzar una altura de dos o tres metros, dependiendo del espacio que tenga.

Posee hojas compuestas divididas en foliolos generalmente de color verde pero, dependiendo de las múltiples variedades existentes, aparecen con mayor o menor presencia dibujos en tonos crema-amarillentos.
Antes de elegir cualquier planta de interior para el hogar, hay que tener en cuenta la ubicación de la casa donde se colocaría ya que, en este caso, necesita mucha luz y bastante espacio donde desarrollarse.
Variedades de chefleras
A continuación, os presentamos algunas de las variedades de cheflera más interesantes y los cuidados básicos que debemos proporcionarles.
1. Cheflera de hoja matizada
La variedad de hoja matizada, como su nombre indica, tiene las hojas verdes matizadas en color crema, que pueden ser más o menos intensas. Necesita mucha más luz, de hecho, puede llegar a aguantar el sol directo, es muy resistente.
2. Cheflera de hojas verdes
Otro tipo de cheflera que resulta muy decorativa es la de hojas completamente verdes.
3. Cheflera mini o cheflera yanini
Finalmente están las más pequeñas que son una variedad en miniatura llamada Cheflera yanini que no llegan a alcanzar ni la mitad de la altura de las otras.
Cultivo de la cheflera o Schefflera Arboricola
El cultivo de la cheflera es muy sencillo. Es exigente con la luz, sobre todo, las variedades con mayor intensidad de matices cremosos. Cultivada en un entorno poco luminoso, perderá las hojas inferiores adquiriendo un aspecto poco decorativo.
Si el sol incide excesivamente sobre el follaje, este puede llegar a perder el tono verde oscuro de las hojas, adquiriendo un verde amarillento propio de un exceso de exposición al sol.
La cheflera debe regarse a menudo pero sin encharcarla. Un exceso de agua, además de podredumbres de tallo, puede derivar en un amarilleamiento de las hojas y su posterior caída.
¿Cómo saber cuándo necesita ser regada? Cuando la superficie de la tierra empiece a secarse, entonces habrá que hacerlo nuevamente.
No exige ser pulverizada, aunque lo agradece, y tolera temperaturas frías rondando los 5º C en invierno.

Últimamente se les está ubicando en balcones protegidos, donde las heladas no les afectan directamente, y sobreviven muy bien durante todo el invierno.
Todas las variedades deben abonarse en primavera y verano con abono para plantas de hoja verde y, de vez en cuando, pulverizarlas con agua para eliminar el polvo y proporcionarles la humedad que tanto les conviene.
Se aconseja girar la planta regularmente para conseguir un efecto homogéneo del follaje. Si vuestra cheflera está sana, crecerá de 30 a 40 centímetros al año.
Principales problemas en el cultivo de la cheflera
1. Plagas y enfermedades
En cuanto a los problemas de la planta cheflera, los más habituales suelen ser el ataque frecuente de los pulgones y las cochinillas, que la dejan casi sin hojas.
Estos insectos lo que hacen es pegarse a las hojas e ir chupando su savia. Después, cuando ya están repletos, expulsan la que les sobra, y esta, al ser un líquido dulce, como una especie de melaza, forma un medio dulce donde cae, ideal para la proliferación de un hongo llamado negrilla que da un aspecto muy sucio a las hojas.
Cómo combatir la cochinilla en la cheflera
Para evitar esto, en cuanto veamos un pulgón o una cochinilla, debemos aplicar un producto de triple acción que matará insectos, hongos y ácaros.
También, se pueden utilizar unas clavos insecticidas que se introducen en la tierra de la maceta y son específicas contra pulgones y cochinillas.
Una opción no química para eliminarla es pasar un algodón con alcohol sobre las hojas de la planta, aunque hay que tener precaución con las larvas.
2. Perdida de hojas y arqueamiento
Con el paso del tiempo también suele ocurrir que las partes inferiores de la cheflera pierdan las hojas y el exceso de altura hace que la planta comience a arquearse.
Si ocurre esto, al inicio de la primavera se recomienda podar severamente, incluso, a la mitad de su volumen total.
Del punto de donde hayamos realizado la poda, surgirán nuevos brotes que asegurarán el porte compacto y la densidad del follaje deseados.