Cómo cuidar la planta de incienso en invierno (guía práctica)

Descubre cómo cuidar la planta de incienso en invierno para que no sucumba ante las bajas temperaturas. Iñigo Segurola te cuenta los secretos para proteger su belleza y aroma, garantizando su salud hasta la primavera. ¡No dejes que el frío dañe tu Plectranthus coleoides!
El Plectranthus coleoides, más conocido como planta de incienso o falso incienso, es una planta muy popular actualmente gracias al aspecto de sus hojas y a su aroma. Es una planta con un olor muy agradable que recuerda mucho al incienso, de ahí su nombre popular.
La belleza ornamental de esta planta, sin embargo, puede verse amenazada con la llegada del invierno. Al ser sensible a las heladas, requiere recibir una serie de cuidados especiales durante estos meses fríos.

En este artículo, te enseñaremos cómo cuidar la planta de incienso en invierno, ofreciéndote consejos prácticos y soluciones para protegerla y mantenerla en óptimas condiciones. ¡Llegará perfecta a la primavera!
¿Qué le pasa a la planta de incienso en invierno?
Los cuidados de la planta de incienso son bastante sencillos pero, con la llegada del invierno, debemos prestar atención a la caída de las temperaturas.
Se trata de una planta sensible a las heladas, por lo que, si vives en una zona con recurrentes heladas invernales, deberás protegerla en el interior de tu hogar. De lo contrario, las hojas comenzarán a defoliarse poco a poco y su sistema radicular puede helarse y dañarse, desembocando en la muerte de la planta.
Si las temperaturas bajan de los 10ºC, deberás protegerla sin ninguna duda, pero si el frío no es excesivo, puedes dejarla en el exterior, incluso aunque llueva mucho.
¿Se puede evitar que muera en invierno?
Claro, siempre y cuando la protejamos del intenso frío durante todos estos meses.

Si la dejas al exterior, salvo que vivas en climas muy cálidos, tu planta sucumbirá y no llegará sana y viva a la primavera siguiente.
Cómo cuidar la planta de incienso en invierno
Si tomas las medidas adecuadas en invierno, tu planta no sufrirá ningún daño y llegará perfecta y preparada para la siguiente estación.
Traslada la planta al interior
Uno de los cuidados más importantes durante el invierno es trasladar la planta al interior de la casa.
Teniendo en cuenta su origen tropical, agradece temperaturas templadas que estén en torno a los 18-21°C. Si bajan mucho en invierno, deberás trasladarla al interior de tu hogar durante toda la estación.
Requiere una buena luminosidad, pero siempre indirecta, por lo que un buen lugar podría ser cerca de una ventana con una cortina que tamice la luz.

Procura que no haya corrientes de aire ni que la calefacción esté muy cerca. Aunque, como ya te explicamos en el artículo sobre Cómo afecta la calefacción a las plantas, salvo que esté excesivamente caliente, no suele afectar a la mayoría de las variedades de interior.
Esquejes al finalizar el verano
Si no cuentas con suficiente espacio, una forma muy sencilla de proteger tu planta de incienso es realizando esquejes.
Esta planta tiene la capacidad de desarrollar raíces si haces unos pequeños cortes e introduces los esquejes en la tierra hacia finales de agosto. De esta manera, podrás tener pequeñas plantas para mantener en tu hogar.
Reduce el riego
Un aspecto clave de cómo cuidar la planta de incienso en invierno es ajustar el riego. La planta entra en una fase de reposo en esta estación, por lo que debes reducir considerablemente la frecuencia con la que la riegas.
Mantén el sustrato ligeramente húmedo, pero nunca te excedas o se podrían pudrir las raíces. Si consideras que la humedad ambiental de tu hogar es muy seca, como puede ocurrir, por ejemplo, en la meseta de la península, la planta se verá beneficiada por pulverizaciones periódicas.
Controla las plagas
Aunque durante el invierno no son tan comunes, siempre hay que estar atento a su aparición. Recuerda que en estos ambientes cálidos de los hogares puede aparecer algún que otro pulgón o ácaro.

Realiza revisiones periódicas y, ante cualquier indicio, fumiga tu planta con un tratamiento específico de abajo hacia arriba.
Prepara la planta para la primavera
Al final del invierno, cuando las temperaturas comienzan a ser mucho más agradables, observarás que la planta de incienso no solo no se habrá helado, sino que estará desarrollando nuevos brotes, sobre todo en su parte central.
Además, al acercarse la primavera, es importante que poco a poco vayas preparando la planta para volver al exterior. Deberás ir aumentando poco a poco la exposición que vaya recibiendo.
Es en este momento cuando Iñigo Segurola te recomienda poner a punto tu planta, y para ello, la poda es un aspecto clave. En el artículo sobre cómo podar y reproducir el incienso o Plectranthus coleoides, te dejamos el paso a paso y consejos a tener en cuenta. ¡Plantas gratis y saneadas, lo mejor!