Estas 5 plantas son perfectas para balcones con mucho sol
¿Tienes un balcón soleado y no sabes qué plantas son adecuadas? El sol directo puede parecer un reto, pero hay muchas especies que se desarrollan perfectamente en estas condiciones. Algunas no solo toleran bien el calor y la luz intensa, sino que florecen con más fuerza gracias a ello.
A continuación, te contamos cuáles son las mejores plantas para balcones muy soleados y cómo cuidarlas para mantenerlas sanas y bonitas durante todo el año.
Geranios, ideales para balcones cálidos y soleados
Los geranios son muy populares en los balcones soleados. Su colorido, facilidad de cuidado y su resistencia al sol directo y a las altas temperaturas los convierten en una de las mejores opciones para exteriores.
Su floración es abundante y llena de color, con tonalidades que van del blanco y rosa al rojo o fucsia. Esta planta necesita mucha luz y un riego adecuado para florecer en plenitud.
Su época de floración va de mayo a septiembre y, si se siguen algunos cuidados específicos, es posible prolongar ese periodo durante algunas semanas más. Pueden tolerar temperaturas elevadas, de hasta 30 °C, pero no resisten bien el frío, especialmente cuando bajan de los 10 °C.
Cuidados básicos:
- Riego regular, en verano se recomienda regar tres veces por semana, pero evitando encharcar el sustrato. Durante el invierno bastara con una.
- Es conveniente retirar las flores marchitas o secas para evitar enfermedades.
- Utilizar macetas con buen drenaje.
Lavanda: encanto mediterráneo
Los balcones soleados son perfectos para la lavanda. Esta planta necesita muchas horas de sol para crecer y florecer. Además, su aroma y su color púrpura aportarán un encanto relajante a tu balcón.
Originaria de la costa occidental mediterránea, es una planta resistente a la que le encanta el sol. Debe recibir, al menos, unas seis horas de luz solar directa al día.
Cuidados básicos:
- La lavanda es resistente a la sequía y necesita poco riego.
- El sustrato debe ser ligero y con buen drenaje.
- Conviene podarla tras la floración para mantener su forma y vigor.
- Florece en primavera y verano.
Buganvilla, color y volumen en forma de enredadera
La buganvilla es una planta trepadora de colores vivos ideal para balcones soleados. Su abundante floración se extiende desde la primavera hasta el otoño. Lo más característico de esta enredadera no son sus pequeñas flores, sino destaca por sus brácteas de colores intensos que no pasan desapercibidas.
Originaria de climas cálidos, esta planta tropical, puede alcanzar hasta ocho metros de altura si cuenta con espacio y las condiciones adecuadas. También se adapta bien al cultivo en maceta, siempre que se utilice un sustrato de calidad.
Para un desarrollo óptimo, conviene situarla en una ubicación soleada, preferiblemente orientada al sur.
Cuidados básicos:
- Necesita pleno sol para florecer en abundancia.
- Requiere riegos regulares: uno semanal si está plantada en suelo y dos si se cultiva en maceta, evitando siempre el encharcamiento.
- Podar para controlar su forma y tamaño.
Verbena, flores pequeñas y coloridas para todo el verano
Las flores de la verbena se agrupan en vistosos ramilletes y resultan ideales para combinar con otras especies en balcones soleados.
Destacan por su amplia gama de colores, que incluye blanco, rojo, rosa, diversos tonos de violeta y azul. Entre ellas, las variedades fucsia y blanca son especialmente aromáticas.
Es una planta perfecta para llenar jardineras o macetas colgantes en balcones soleados. Su floración se prolonga desde la primavera hasta el otoño, siempre que reciba suficiente luz solar.
Cuidados básicos:
- Riego moderado, preferiblemente cuando el suelo se seca.
- Exposición directa al sol para florecer con intensidad.
- Retirar las flores secas ayuda a prolongar la floración.
Dalia, una flor ornamental que destaca al sol
Las dalias se distinguen por sus flores grandes y vistosas, ideales para aportar un toque decorativo al balcón. Existen numerosas variedades en una amplia gama de colores como rosa, malva o blanco, lo que permite combinarlas fácilmente con otras plantas.
Florecen en verano y mantienen su colorido hasta bien entrado el otoño. Para desarrollarse correctamente, necesitan abundante luz solar y riegos frecuentes, evitando el encharcamiento. Es recomendable ubicarlas en zonas protegidas del viento, ya que sus tallos pueden ser frágiles ante corrientes fuertes.
Cuidados básicos:
- Necesitan al menos 6 horas diarias de sol directo.
- Riego regular, manteniendo el sustrato ligeramente húmedo.
- Requieren un sustrato rico en nutrientes.
