Patatas fritas: ¿es mejor dejar la piel o quitarla?

Patatas fritas con piel
Patatas fritas con piel | Hogarmania

A quién no le gustan las patatas fritas, crujientes y perfectas para acompañar con una salsa o disfrutar solas. Pero, ¿te has preguntado si puedes comerlas con piel? La respuesta es sí, y aquí te cuento por qué deberías comerlas con piel.

Patatas fritas: ¿es mejor dejar la piel o quitarla?

Desde pequeños nos enseñaron a lavar bien cualquier tubérculo, especialmente por la tierra que puede quedar en los recovecos. Y es cierto, una buena limpieza es importante. Pero una vez limpias, puedes aprovechar todos los nutrientes que la patata almacena en su piel.

De hecho, en muchos restaurantes ya es común ofrecer patatas fritas con piel. A mí personalmente me encanta la textura que aporta. Además, suelo aplicar la misma lógica a otros vegetales como las zanahorias: un buen cepillado y están listas para cocinar.

Hace poco, Joseba Arguiñano preparó un cachopo de rape y mojama que acompañó con patatas fritas con piel, y el resultado fue espectacular. Si aún no lo has probado, te animo a hacerlo.

Beneficios de la piel de la patata

La piel de la patata esconde muchos nutrientes beneficiosos como el potasio, calcio, antioxidantes como la vitamina C, carotenoides y ácidos fenólicos, que combaten los radicales libres responsables del envejecimiento celular.

Además, también contiene hierro, zinc, fósforo y vitaminas del complejo B, como la B6, que estimula la producción de serotonina. Comer patatas con piel no solo las hace más saciantes, sino que también aporta más fibra a tu dieta. Incluso hay quienes utilizan la piel de la patata para hacer chips, y quedan muy, pero muy crujientes.

Chips de piel de patata
Chips de piel de patata

Ahora que sabes que la piel almacena tantas vitaminas y minerales, aquí tienes algunos consejos para consumir patatas con piel de forma segura:

  • Descarta las patatas con marcas verdes y brotes : Estas pueden contener solanina, una sustancia tóxica que aparece por la exposición a la luz o como defensa de la patata contra plagas. Si ves estos signos en tus patatas, es mejor no consumirlas. Almacena tus patatas en un lugar oscuro para evitar este problema.
  • Usa un cepillo para lavarlas bajo el grifo : Un buen cepillado elimina cualquier resto de tierra. Asegúrate de usar un cepillo destinado solo para alimentos. Si no tienes uno, puedes frotarlas con los dedos.
  • Enjuágalas bien antes de comerlas cocidas: Si cocinas las patatas con piel, el agua caliente ayudará a limpiarlas, pero es importante enjuagarlas bien antes de consumirlas.

Elaboraciones no recomendadas

Si bien es cierto que la textura de la piel de la patata puede ser interesante en algunas recetas, hay ocasiones en las que definitivamente es mejor pelarlas. Por ejemplo, si vas a preparar una tortilla de patatas o un puré, es recomendable pelarlas para obtener una textura más suave y uniforme.

Sin embargo, si vas a consumirlas al vapor, hervidas, al horno o fritas en la sartén o en freidora de aire, funcionan muy bien como guarnición con la piel. La piel agrega un toque crujiente y aporta nutrientes adicionales, además de ahorrar tiempo en la preparación. Así que, dependiendo de la receta, puedes decidir si dejar la piel o no.

stats