Delicias de mejillón por Karlos Arguiñano: las irresistibles croquetas cuadradas que vas a querer probar

Los mejillones son "un alimento 10" que podemos preparar de diferentes formas: al vapor, en escabeche, rellenos... Aunque podéis comprar mejillones de lata o congelados, Karlos Arguiñano nos propone apostar por los mejillones frescos para preparar sabrosos aperitivos como estas delicias de mejillón.

Una especie de croquetas caseras, pero en lugar de darles la tradicional forma redondeada, las haremos en versión cuadrado. Originales, fáciles de hacer, ¡una auténtica delicia!

Ingredientes (4 personas):

• 2 kg de mejillones (350 g sin concha)
• 1 cebolleta
• 700 ml de leche
• 70 g de harina
• Harina, huevo batido y pan rallado (para rebozar)
• Aceite de oliva virgen extra
• Sal
• 1 guindilla cayena
• perejil

Elaboración de las delicias de mejillón por Karlos Arguiñano:

Para limpiar los mejillones, enjuágalos con agua, ráspales las cáscaras con un cuchillo para eliminar cualquier adherencia que puedan tener y retírales las barbas.

Pon a calentar un poco de agua en una cazuela grande, agrega los mejillones, tapa y cuécelos hasta que se abran. Retírales las conchas y reserva la carne.

Para hacer la bechamel, calienta una cazuela con un chorrito de aceite. Corta la cebolleta por la mitad, pícala en daditos, añádela a la cazuela y cocínala a fuego suave durante 10 minutos. Añade la guindilla y la harina. Rehógala un poco y vierte la leche poco a poco sin dejar de remover. Cocina la bechamel durante 4-5 minutos y retira la guindilla.

Pica la carne de los mejillones e incorpórala a la cazuela. Sazona y cocina la masa durante otros 3-4 minutos sin dejar de remover.

Pasa la bechamel a un recipiente (o fuente) amplio y espera a que se temple. Tápala con film de cocina e introdúcela en el frigorífico hasta que endurezca y esté bien fría (mejor si se prepara de víspera).

Sácala del recipiente y córtala en cuadrados. Pásalas por harina, huevo batido y pan rallado, y fríelas en una sartén con abundante aceite.

Pásalas por harina, huevo batido y pan rallado, y fríelas en una sartén con abundante aceite.

Sirve las delicias de mejillón y adorna los platos con unas hojas de perejil, ¡al estilo Karlos Arguiñano! Ni él se ha podido resistir a la tentación de probarlas.

Karlos Arguiñano probando las irresistibles delicias de mejillón.

Consejos:

• Si os sobran algunas delicias, lo más recomendable será congelarlas sin freír para consumirlas en cualquier otra ocasión.
• A la hora de cocer los mejillones, si hay alguno que no se abre, lo más conveniente será tirarlo porque igual está malo y si nos lo comemos podríamos intoxicarnos.