Quiche de queso y cebolla caramelizada

Entre las recetas de quiche fáciles que puedes preparar en casa hoy te propongo un clásico que no falla: la quiche de queso y cebolla caramelizada. Karlos Arguiñano te da la clave para hornear la pasta brisa o masa quebrada, la base de la quiche, para que quede bien crujiente y cómo preparar el relleno más cremoso con leche evaporada y queso curado.
Raciones
4
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
15 m
Cocinado
45 m
Tiempo total
45 m
Como la tortilla de patata de la cocina española, la quiche es uno de los platos más populares de la cocina francesa y la quiche Lorraine una de sus recetas emblemáticas. Se trata de una tarta salada con base de pasta brisa o masa quebrada, que puedes hacer casera o comprarla ya preparada para una receta más rápida como te propongo aquí.
El relleno de la quiche suele ser una mezcla de huevos batidos, crema de leche o nata e ingredientes como jamón y queso, verduras, carne, mariscos o hierbas aromáticas. Aquí utilizo huevos, leche evaporada para una receta más ligera, queso curado rallado y cebolla caramelizada. Una receta vegetariana sin bacon, panceta ni elementos cárnicos.
La quiche se cocina al horno en 2 tiempos: solo la masa (18-20 minutos) y con el relleno (18-20 minutos), en total en 40 minutos estará lista. Este es el secreto para conseguir una base crujiente y un relleno cremoso. Sigue la receta de Karlos Arguiñano y no fallarás.
Ingredientes (4 personas)
- 1 lámina de pasta quebrada (redonda)
- 220 g de queso manchego curado
- 3 cebollas rojas
- 3 huevos
- 175 ml de leche evaporada
- 1 cucharada de mostaza
- 60 g de canónigos
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta
- Perejil
Cómo hacer quiche de queso y cebolla caramelizada
1. Hornea la pasta quebrada
Cubre un molde de silicona redondo con la pasta quebrada. Pon encima la hoja de papel sulfurizado (con la que suele venir), agrega una buena cantidad de garbanzos crudos (destinados a este fin) y hornéala (horno precalentado) a 190ºC durante temperatura durante 18-20 minutos. Retírala del horno y deja que se temple.
2. Carameliza la cebolla
Calienta una sartén grande con 4 cucharadas de aceite. Pela las cebollas, córtalas en juliana fina y añádelas. Sazona y rehógalas a fuego suave medio durante 20-25 minutos.
3. Prepara el relleno de queso y cebolla
Retira la corteza del queso, rállalo y resérvalo.
Casca los huevos a un bol, salpimiéntalos y bátelos bien. Añade la leche evaporada, el queso rallado y la cebolla caramelizada (bien escurrida), y mezcla bien.
3. Vierte la mezcla sobre la pasta y hornea
Unta la tartaleta de pasta brisa con la mostaza, vierte encima la mezcla de huevos, queso y cebolla, y hornéala a 190ºC durante 18-20 minutos. Retírala y deja que se temple.
Adereza las hojas de canónigo con aceite y sal.
Divide el quiche en 8 porciones y sirve una 2 en cada plato. Acompáñalas con los canónigos y decora los platos con unas hojas de perejil.

Consejos para hacer quiche de queso y cebolla
Te recomiendo aprovechar los tiempos de horneado para adelantar otras elaboraciones y hacer la receta más rápida. Mientras se hornea la base de pasta brisa (18-20 minutos) aprovecha para caramelizar la cebolla que necesita un tiempo similar (20-25 minutos) cocinándola a fuego suave para que vaya cogiendo color y el punto de dulzor perfecto.
Para darle chispa a la quiche he cubierto la base horneada con salsa de mostaza antes de añadir el relleno. Además, para la mezcla utilizo queso manchego curado que tiene más potencia que los quesos frescos, perfecto para esta receta. Otra opción que combina a la perfección con la cebolla caramelizada es el queso de cabra, ¡pruébalo!
Como consejo final, para que no se rompa la quiche al desmoldar, lo mejor es utilizar un molde desmoldable de silicona que facilita mucho el trabajo.
Y si te ha gustado esta receta no te quedes sin probar la clásica quiche de jamón y queso o con verduras como la quiche de espinacas o la quiche de calabacín.