Calendario del huerto: qué puedes plantar en septiembre

¡Septiembre es el verdadero inicio del año para los amantes de la jardinería! Descubre los cultivos perfectos para esta temporada y cómo asegurar una cosecha exitosa. ¡Es el momento de planificar y revitalizar tu huerto!
Septiembre es para muchos de nosotros el verdadero inicio del año, mucho más importante que el día de año nuevo en enero, ¿verdad?
Bien podríamos entenderlo así también en jardinería, ya que en septiembre, después del seco y caluroso verano, llegan las primeras lluvias y, con ellas, los primeros brotes.
Por tanto, septiembre es el mes clave para decidir y planificar qué cultivos queremos cultivar en nuestro huerto, sobre todo durante los meses de otoño y de primavera. Por ello no solo es buena idea tener claro qué queremos cultivar, cuándo y dónde, sino también adquirir las herramientas y productos necesarios para poder llevarlo a cabo.
Pero siendo sincero... ¡Yo también he estado todo el verano esperando a este momento! ¿Qué podemos plantar en nuestra huerta en septiembre? ¡En este artículo te damos algunos ejemplos!
¿Qué plantar en septiembre en tu huerto?
Judías
Antes de hablar de cómo cultivar judías es necesario que hablemos primero de sus requerimientos. Por ejemplo, las judías difícilmente crecerán cuando las temperaturas son menores a 10 °C, la cantidad de luz es baja o están muy expuestas al viento.
Teniendo esto en cuenta y conociendo el mes en el que nos encontramos debemos comenzar pronto con su cultivo, para evitar la entrada de las bajas temperaturas que pueden hacer que aparezcan las conocidas como vainas en gancho.
Si en tu zona las temperaturas se mantienen relativamente cálidas hasta mediados de otoño no será un gran problema, pero si no es así te recomiendo que cultives, siempre que sea posible, dentro de un invernadero.

Algo muy valioso de las judías es que pertenecen a la familia de las leguminosas, por lo que su abonado no es muy necesario, ya que ellas mismas, en cooperación con algunos microorganismos, son capaces de enriquecer los suelos con nitrógeno. Por lo demás el cultivo de judías es bastante sencillo.
Para comenzar debemos saber que, aunque podemos realizar tanto una siembra directa como utilizar un semillero, te recomiendo que optes por la siembra directa, ya que el trasplante puede debilitar nuestros ejemplares. Si prefieres la primera opción, aprende çómo hacer semilleros de forma correcta.
Aun así, en ambos casos debemos enterrar nuestras semillas en una profundidad de entre 2 y 3 centímetros, colocando unas 4 o 5 semillas por cada hoyo, con la posterior criba para dejar un único ejemplar. En poco más de una semana comenzarán a emerger las primeras plántulas, que podremos trasladar a su ubicación definitiva cuando los brotes tengan unos 5 cm de altura, espaciando cada ejemplar unos 30 centímetros.
La judía requiere una alta exposición solar, por lo que lo ideal es que la ubicación que escojamos les asegure entre seis y ocho horas de sol directo al día. Lo ideal es plantar nuestras judías en suelos mullidos, frescos y ricos en humus, evitando los suelos fríos y excesivamente húmedos o secos.
Lentejas
¿Tú también plantabas lentejas en un vasito con algodón en el colegio? ¡Ya es hora de que lo hagamos de verdad! Puedes comenzar con el cultivo de lentejas desde septiembre siempre que tu clima sea cálido y los otoños e inviernos sean suaves, con unas temperaturas que no sean inferiores a los 6 o 7 °C y evitando siempre las heladas.
La buena noticia es que debido al tamaño de la planta es muy sencillo cultivarla en jardineras o macetas, por lo que no es necesario tener suelo para hacerlo. En este caso también podemos escoger entre realizar una siembra directa o utilizar semilleros, aunque te recomiendo encarecidamente la segunda opción, ya que es una especie muy sencilla de germinar.
Para ello mantén las lentejas a remojo durante una noche y prepara el semillero, que deberá ser un recipiente con una capa de tierras enriquecida con un poco de compost, donde debemos enterrar las semillas a unos 5 milímetros de profundidad.

Una vez hemos colocado las semillas debemos regar abundantemente las semillas y mantener la humedad constante durante una semana aproximadamente, por lo que quizás sea necesario un nuevo riego.
Después de esto ya podemos trasplantar las lentejas a su ubicación definitiva, separando cada planta unos 20 centímetros entre sí. Esta ubicación definitiva no tiene por qué ser un recipiente muy amplio, aunque sí profundo, bien drenado, y que tenga una buena exposición a la luz solar.
Una vez que el cultivo se haya establecido solo es necesario que coloquemos unos tutores o guías para facilitar el crecimiento vertical y proporcionarle unos riegos que permitan mantener una humedad constante. Entre 80 y 100 días después (la señal concreta será que más del 50% de la planta esté seca) podremos cosechar nuestras propias lentejas.
Ajo
Al igual que ocurre con las lentejas el ajo es otro de los cultivos estrellas del otoño, al igual que también es un cultivo muy sencillo, que podemos cultivar tanto en el suelo como en maceta y cuyas semillas podemos obtener directamente de nuestro supermercado.
Para comenzar con este cultivo debemos colocar directamente en su ubicación definitiva diferentes dientes de ajo, siempre con sus puntas hacia arriba para facilitar la aparición de las raíces.

Debemos enterrarlos a unos 10 centímetros de profundidad, distanciando cada hoyo unos 10 centímetros entre sí y en apenas dos semanas veremos aparecer las primeras germinaciones.
Los requerimientos del ajo son bajos, aunque el correcto riego es fundamental. Esta planta tiene cierta tendencia a pudrirse, por lo que el riego debe ser moderado y basarse siempre a la humedad del suelo, que debe mantenerse algo húmedo y nunca encharcado.
Es importante también que este suelo esté enriquecido en nutrientes (sobre todo potasio y fósforo), sea suelto y, sobre todo, esté bien drenado.
Algunos consejos muy útiles que te puedo dar para plantar ajos de forma óptima es, por ejemplo, cortar la flor cuando aparezca, para que de esta forma la planta destine todos sus recursos al desarrollo del bulbo, la cabeza de ajo que acabaremos recogiendo.
Otra gran idea es anudar las hojas del ajo para que estas se sequen y suceda esta misma movilización de recursos, por lo que te recomiendo que combines ambas técnicas. Dos o tres semanas después el tallo estaría completamente seco y será el momento de extraer el bulbo, que después de un secado al aire libre durante un par de días estará listo para su consumo.
Cebolla
La cebolla es uno de los bulbos que más comúnmente comemos en nuestra dieta, ¡además su cultivo es super sencillo! Para comenzar a plantar cebollas debemos elegir una ubicación adecuada para ellas, que deberá contar con una buena exposición al sol y un suelo bien drenado que impida su fácil encharcamiento.
Te recomiendo que remuevas este suelo y retires todas las piedras y malas hierbas que puedas encontrar, de manera que consigas un suelo bien aireado y suelto. Puedes elegir entre sembrar las semillas directamente en el suelo, a unas distancia de unos 10 o 15 centímetros entre sí o utilizar semilleros para ello.

En ambos casos las primeras plántulas aparecerán durante la segunda semana, pudiendo trasladarlas a su ubicación definitiva desde los semilleros cuando alcancen un tamaño de unos 15 centímetros.
Para su correcto desarrollo deberemos mantener el suelo húmedo mediante un riego regular, sobre todo durante los primeros meses, ya que será la etapa de crecimiento de nuestra planta. ¡Recuerda, siempre evitando el encharcamiento, ya que los bulbos tienen facilidad para pudrirse!
Poco a poco deberemos reducir la frecuencia de este riego y cuando las hojas comiencen a marchitarse y a caer será el momento de recolectar estos bulbos.
Septiembre es la verdadera vuelta al cole para los aficionados a la jardinería como nosotros. Estos son solo mis 4 ejemplos favoritos con los que empezar a trabajar la tierra, pero también podríamos comenzar con coliflores, apio, espinacas... ¡De todos ellos hemos hablado en otros artículos anteriores que te seguimos recomendando!
¿Qué más hortalizas conoces que podamos comenzar a cultivar en septiembre? Si eres de los que te gusta saber cuáles serán nuestras próximas recomendaciones, no te pierdas este artículo en el que te adelantamos todo sobre la huerta en otoño e invierno.