Descripción general del Anturio o Anthurium andreanum
- Nombre común: Anturio
- Nombre científico: Anthurium andreanum
- Familia: Aráceas
- Origen: Sudamérica
- Ubicación: Interior
- Floración: Verano
- Luz: Muy luminoso
- Riego: Moderado, evitar encharcamientos
- Abono: Abono de floración en primavera y verano cada 15 días
Características del Anturio o Anthurium andreanum
El Anturio o Anthurium andreanum es una planta de interior con doble interés decorativo: posee unas atractivas, llamativas, duraderas y singulares flores que visten de color la planta y unas hojas acorazonadas o lanceoladas (en punta), en tono verde muy resistentes y elegantes.
Distintas etapas de maduración de la hoja del Anthurium andreanum
Las inflorescencias están compuestas por un espádice y por una espata. Los espádices tienen una gran cantidad de puntitos blancos y, cada puntito, se trata de una flor. La suma de todos esos puntitos de flor es lo que crea la inflorescencia.
¿Cuánto tiempo duran las flores? Pueden llegar a durar hasta dos meses y, una vez marchitas, se deben eliminar desde la base para inducir la aparición de nuevas flores.
Con los cuidados adecuados, el anturio puede estar floreciendo a lo largo de todo el año. ¡La planta de interior con flor perfecta!
Especies de Anturio
Las especies de Anturio más conocidas en el mundo son el Anthurium andreanum y Anthurium scherzerianum.
El A. andreanum, nuestro protagonista de hoy, tiene la espata de color rojo y el espádice en tono amarillento. Su inflorescencia es de tamaño grande y tiene las hojas grandes y vigorosas.
De izq. a drcha.: Anthurium scherzerianum y Anthurium clarinervium
El A. scherzerianum, también conocido como Flor de Flamenco, desarrolla hojas coriáceas, oblongas a elípticas y flores con espatas grandes de color rojo anaranjado.
Otras especies muy interesantes de anturio son el Anthurium clarinervium, el Anthurium magnificum y el Anthurium forgetii.
Las características de las diferentes variedades que existen de anturios están diferenciadas, sobre todo, por la espata de cada una.
Los cuidados del Anturio o Anthurium andreanum
Humedad
Es una planta de interior fácil de cultivar. Lo único que sí que hay que tener en cuenta es que es exigente en cuanto a humedad ambiental ya que es una planta que procede de la selva tropical colombiana.
A pesar de ser muy florífera, puede ocurrir que deje de hacerlo. ¿Por qué no vuelve a florecer un anturio? El motivo más habitual suele ser una escasez de humedad en el entorno.
La humedad en el entorno en determinante para la floración del Anturio
En toda la costa española el anturio suele desarrollarse a la perfección, sin embargo, no lo hace tan bien en la Meseta.
Si, además, hay calefacción central en los hogares, se acentúa muchísimo más esa sequedad del ambiente. ¿Qué hacer en estos casos? Es recomendable tener en cuenta lo siguiente:
- Pulverizar las hojas frecuentemente:
Las hojas del Anthurium andreanum agradecen ser pulverizadas con frecuencia. De esta forma, se consigue adaptar su crecimiento en el interior de las casas y se convierte en una de las plantas de interior más agradecidas por su incesante floración.
El agua con la que se debe pulverizar la planta tiene que ser blanca o que tenga poca cal.
Pulverizad el Anturio para que tenga la humedad ambiental suficiente
- Usar humidificadores u otros sistemas:
Una idea muy sencilla para mantener una humedad constante es la utilización de un humidificador cerca de las plantas. ¡Los beneficios de los humidificadores para el hogar son muchísimos!
Otra forma de conseguirlo es colocando la maceta sobre un plato con guijarros y agua. Este sistema es muy utilizado para cultivar los helechos en casa.
Luz y temperatura
Además de un ambiente húmedo, el anturio también necesita estar en una zona luminosa.
Se recomienda que esté cerca de una ventana donde el sol se filtre a través de una cortina para así, evitar las quemaduras de las hojas.
Riego
El sustrato siempre debe mantenerse húmedo pero sin encharcamientos. Con un exceso de agua, tiende a amarillear y a perder las hojas progresivamente.
Regaremos durante el periodo de crecimiento (primavera y verano) cuando la tierra empiece a secarse, es decir, aproximadamente, cada semana un par de veces. Durante el periodo de reposo, regaremos menos.
Retirad el agua sobrante tras el riego
El proceso para regar esta planta roja es muy sencillo: regáis y, al cabo de una hora, como el agua va a ir llegando hasta la parte inferior, quedará en la maceta embellecedora. Debéis retirar entonces la cantidad sobrante.
Puede que lo desconozcáis pero, una de las razones por las que el anturio deja de florecer es por una falta de humedad ambiental. No olvidéis pulverizarla una o dos veces a la semana con agua tibia (evitando las flores) y limpiar sus hojas para que puede realizar la fotosíntesis sin problema.
*Os contamos lo sencillo que es limpiar y dar brillo a las hojas de las plantas de interior.
Abono
Durante la época de floración, hay que aportar un abono de floración al agua de riego. Esto provocará un incremento en la aparición de nuevas y majestuosas flores.
Abono de forma periódica en el Anturio
Hay que utilizar la cantidad recomendada según el fabricante para que planta reciba la cantidad adecuada de nitrógeno, fósforo y potasio.
Poda
Una vez que la inflorescencia empiece a marchitarse, habrá que cortarla. Esto propiciará que desarrolle nuevas.
Cómo realizar el trasplante del Anturio
Si al sacar el cepellón de la maceta, observáis que sus raíces todavía no han ocupado toda la tierra, no sería necesario su trasplante.
En general, el Anthurium andreanum es una planta de interior que apenas necesita trasplante.
Las raíces no han cubierto la totalidad del sustrato del Anturio
Si la planta llega al extremo de tener una mata con pequeños tallos que se van alargando, podéis proceder a trasplantarlo enterrando los esquejes de tallos con presencia de raíces aéreas que observéis en la base del anturio.
Plagas y enfermedades del Anturio
Las plagas que suelen atacar al anturio son la cochinilla, el pulgón, los tips, los Nemátodos y los ácaros.
Por contra, las enfermedades más habituales son la pudrición de la raíz, el tizón bacteriano del anturio rojo, la antracnosis, las infecciones fúngicas producidas por Phytophthora y Pythium, Virus del mosaico, Pseudomonas, la Xanthomonas... En cuanto sea vea cualquier pequeño daño, deberemos actuar contra ellas.