¿Cómo hacer caramelo líquido casero? Preparación paso a paso

Hacer caramelo en casa es como tener un as bajo la manga en la cocina. No solo es más barato que comprarlo, sino que también te da el control total sobre los ingredientes y el sabor. Desde cubrir postres (como el famoso flan de turrón de Eva Arguiñano) hasta darle un toque extra a tus bebidas, el caramelo casero puede llevar tus creaciones al siguiente nivel. Por eso, aquí tienes la receta perfecta para hacer caramelo paso a paso.
El caramelo es tan versátil que prácticamente se puede usar en cualquier receta. Desde helados hasta pasteles, flanes, brownies, muffins, cupcakes, tartas y mucho más, el caramelo puede convertir cualquier receta dulce en una auténtica delicia. Pero no te equivoques, el caramelo también puede ser un complemento increíble para platos salados como el cerdo caramelizado al jengibre... Desde aderezos para ensaladas hasta salsas para carnes o vegetales, e incluso marinadas para barbacoas, el caramelo puede añadir un toque de dulzura a tus platos salados favoritos.
¿Por qué es mejor hacer caramelo en casa que comprarlo hecho? Bueno, para empezar, te permite evitar todos esos conservantes y aditivos que suelen tener los caramelos comerciales. Además, puedes ajustar la dulzura y la consistencia a tu gusto personal.
¿Qué necesitas para tu caramelo?
- 3 cucharadas de azúcar
- 1 cucharada de agua
- 1/3 de cucharada de zumo de limón
Elaboración paso a paso
Pon el azúcar en una sartén y añade el zumo de limón. Luego incorpora el agua y mezcla.
Deja que cocine a fuego suave hasta que los ingredientes queden bien integrados.
Cuando empiece a tomar color deja que se tueste un poco más. Retíralo del fuego, deja que se temple y cuando desaparezcan las burbujas distribúyelo en el molde.

¿Cómo se hace para que el caramelo no se ponga duro?
Para evitar que el caramelo se ponga duro, añade una pizca de sal y una cucharada de mantequilla a la mezcla. Esto ayuda a mantenerlo suave y cremoso, incluso cuando se enfría.
Diferencias entre el caramelo y el toffee
El caramelo tiende a ser más suave y cremoso, con un sabor más ligero, mientras que el toffee es más duro y tiene un sabor más intenso, a menudo con notas de mantequilla y nueces.
- Ingredientes y sabor : El caramelo se hace generalmente cocinando azúcar con un poco de agua y zumo de limón hasta que se derrita y caramelice, y luego, si se desea, se añade mantequilla para mejorar la consistencia. Tiene un sabor suave y dulce. Por otro lado, el toffee se hace cociendo azúcar con mantequilla y a menudo se agrega jarabe de maíz o miel para darle un sabor más rico y profundo. El toffee tiende a tener un sabor más intenso y a veces se describe como caramelo con sabor a mantequilla .
- Textura : La textura del caramelo tiende a ser más suave y cremosa, mientras que el toffee es más duro y quebradizo. El caramelo se puede verter sobre postres o sumergir frutas, mientras que el toffee se puede romper en pedazos para comer como caramelo duro.
- Punto de cocción : El caramelo se cocina a una temperatura más baja que el toffee. Mientras que el caramelo se cocina hasta que alcanza el punto de caramelo, alrededor de 170-180 °C (340-360 °F), el toffee se cocina a una temperatura más alta, alrededor de 150-160 °C (300-320 °F), lo que le da su consistencia más dura y quebradiza.
Ideas para acompañar a tu caramelo líquido casero

Con esta receta simple, puedes disfrutar del dulce placer del caramelo casero en cualquier momento y en cualquier lugar. Pero si te falta inspiración aquí tienes algunas sugerencias a las que puedes añadir un toque de caramelo.
- Viértelo sobre helado o yogur.
- Úsalo como cobertura para pasteles, brownies o tartas.
- Añádelo a tu café o batido para darle un toque dulce.
- Úsalo como dip para frutas frescas, como manzanas o fresas.
- Mezcla un poco en tu avena o cereales para el desayuno.
- Úsalo como salsa para decorar platos de postre, como flanes o pudines.