Fregola con frutos del mar, ¡un plato típico de Cerdeña!

Che buono! Nuestro querido Arguiñano se ha marcado una rica fregola ai frutti di mare al puro estilo italiano. Un tipo de pasta con especial parecido al arroz (por su tamaño) pero con otra textura. O mejor dicho, una pasta maravilla (sí sí, la pasta lluvia que usamos en las sopas) pero un poco más grandes.

Son unas bolitas de sémola de trigo duro originarias de la isla de Cerdeña y muy usadas en recetas melosas de marisco. Todo un descubrimiento para los que nos encanta innovar con platos diferentes y llenos de sabor. Eso sí, el resultado es igual de jugoso que la famosa paella de marisco tan típica en nuestro recetario.

Lo mejor de este plato es que vamos a cocer la fregola con el caldo en el que haremos las gambas y los mejillones. ¡Un baño con sabor a mar muy enriquecedor! Además, luego le añadiremos también calamares y salsa de tomate para hacerlo un plato todavía más sabroso. ¡Nada complicado!

El mayor tiempo que pasaremos en esta receta será haciendo el caldo de las gambas y limpiando los mejillones. ¡El resto se hará en un boleo! (como comprobarás) Pero no pretendas que queden como unos espaguetis al ajillo, ya que su resultado será más meloso y jugoso. Y tampoco necesitarás usar demasiada sal ya que los sabores del plato son bastante intensos.

Si me seguís la pista, os enseño a hacer esta pedazo fregola sarda a la marinera tal y como la ha preparado Karlos Arguiñano. ¡Rica, sencilla y para toda la familia!

Ingredientes para 4 personas

• 320 gr. fregola (mediana)
• 1 kilo de mejillones
• 6 calamares limpios (400 gr.)
• 400 gr. de gambas
• 200 ml. de salsa de tomate
• 1 diente de ajo
• aceite de oliva virgen extra
• sal
• perejil

Cómo hacer la fregola con marisco

Prepara las gambas

Pela las gambas y reserva por un lado las colas y por otro las cascaras y las cabezas.

Calienta 2 cucharadas de aceite en una cazuela y agrega las cáscaras y las cabezas de las gambas.

Rehógalas durante 3-4 minutos y cúbrelas con un litro de agua. Agrega una pizca de sal y deja que se cocine unos 15 minutos aproximadamente. Cuela el caldo y ponlo en un bol grande.

Prepara los mejillones

Calienta el wok con un vaso de agua (o 150 ml).

Limpia los mejillones e introdúcelos en el agua uno a uno con una pizca de sal. Cocínalos hasta que se abran y cuela el caldo también. Quítales las cáscaras a los mejillones y resérvalos.

Mezcla el caldo de las cabezas de las gambas con el de los mejillones. ¡Y ya tenemos listo el caldo que usaremos para hacer la fregola!

Prepara los calamares

Calienta 3 cucharadas de aceite en una tartera al fuego. Pela el diente de ajo, lamínalo y añádelo a la tartera para que dore un poco.

Limpia lo calamares y córtalos en aros. Sazónalos.

Cuando el ajo de la tartera coja color, sube a fuego fuerte e introduce los calamares y las gambas con otra pizquita de sal.

Remueve y deja que se rehogue todo junto unos 2 o 3 minutos aproximadamente. Luego retíralos a un plato y reserva.

En la misma tartera agrega la fregola y rehógala brevemente con tres cacillos del caldo que hemos elaborado. Cuécela a fuego medio unos 4 o 5 minutos aproximadamente sin dejar de remover.

Añade la salsa de tomate y sigue cocinándola unos 5 minutos más sin dejar de remover.

Agrega las gambas y calamares que hemos reservado antes dentro de la tartera.

Incorpora también los mejillones cocidos sin cáscara y remueve todo bien.

Espolvorea un poco de perejil picado por encima y ¡listo! Ya podréis servir esta receta de 10 en platos y decorarlos con unas hojitas de perejil.

Trucos para que te salga perfecta la fregola

¿Por qué es importante rehogar las cabezas de las gambas?

Karlos Arguiñano siempre nos dice que rehogar los ingredientes hará que realcemos el sabor de los mismos. En este caso, con el sofrito de las cabezas en aceite conseguiremos darle una buena base a nuestra fregola.

Limpia bien los mejillones

A la hora de preparar mejillones e importante limpiarlos bien y en el último momento, justo antes de cocinarlos, retirarles las barbas.

Quítale las barbas con ayuda de un cuchillo de puntilla y nunca utilicéis los mejillones que estén abiertos. Siempre deben estar cerrados, de lo contrario, significará que no están buenos.

Cuando tengáis dudas de si un mejillón está bueno o no, le dais unos golpecitos y si se cierran, están buenos. En caso de que se mantengan iguales con el golpe, no estarán buenos.

O si lo prefieres, ¡sigue el truco de Argui! Métele un trocito de perejil a un mejillón que veas abierto y si se cierra, ¡está perfecto!

Aprovecha el tiempo

Mientras preparas el caldo con las cabezas de las gambas, limpia los mejillones uno a uno y colócalos dentro del wok con agua para que se vayan abriendo.

Sobre la fregola

Podemos encontrar fregolas un poquito más gruesas que las que usamos en esta receta que se tienen que cocer en unos 15 minutos más o menos. No obstante, como esta es más fina y más pequeña, la tendremos lista en 9 minutos aproximadamente.

Si no tenéis fregola en casa (o directamente no os convence), podéis usar otro tipo de pasta que más os guste. Aunque realmente la magia está en hacer este plato como si fuera una paella de marisco pero sustituyendo el arroz por pasta del mismo tamaño.

Cocción de la fregola

A medida que la fregola vaya absorbiendo el caldo, vierte un poco más si consideras que hace falta y déjala cocinar unos 5 minutos aproximadamente sin dejar de remover. Luego agrega la salsa de tomate y cocínala otros 5 minutos más.